Capítulo 12

-OOOwwww que adorables – Chillo Luz mirando enternecida a Yumiko, quien gradualmente su tono de piel iba volviéndose más y más rojo. La chica bajo la mirada avergonzada.

Lincoln por su parte tampoco la estaba pasando demasiado bien. Por lo general, el albino se estaría riendo un poco al ver la pena de su amiga. Sin embargo, el hecho de tener a Marco molestándolo constantemente y a Gaz mirándolo con una media sonrisa, solo ocasionaban su irritación.

-Ay vamos, la razón por la que tardaste tanto fue para traer a tu peque?a novia, eh. Lo entiendo, lo entiendo, yo querría ir por mi chica para un "rapidito" para venir con el mejor humor – Dijo Marco enrollando su brazo alrededor del cuello de Lincoln con una sonrisa burlona.

-Aunque un poco chiquita para ti, ?no lo crees?, Digo, no soy nadie para meterme donde no me llaman, pero mírate a ti y mírala a ella, la vas a matar, bastardo – Para mayor desagrado de Lincoln, Gaz también se unió. Aunque todo sea dicho, eso sorprendió ligeramente a Marco, normalmente, Gaz se abstenía a comentar o a molestar a otros, pero le resto importancia, así sería más divertido.

-Suuuuiiii – Silbó Bloddy, quien tenia una media sonrisa, no tenía ni que decir nada para ver la vena palpitante en la frente de Lincoln, pero, si Lincoln miraba a su contraparte, notaría que él estaba tan fastidiado como él. – Que tal si ya nos dejamos de mariconadas y les pateamos el trasero – Propuso Bloody rechinando los dientes.

-(Ganas no me faltan, pero estoy seguro que eso solo les dará el gusto) – Contesto Lincoln, mientras se quitaba el agarre de Marco.

-Ay, perdón, no sabía que te ardiera tanto – La vena en la frente de Lincoln, paso a ser múltiples venas al borde de estallar, mientras miraba a Marco a solo un comentario más de darle un golpe.

Por el otro lado, teníamos a Luz conversando con Yumiko. Si el preguntarle muchas cosas a la apenada ni?a se podría considerar charla.

-?Entonces qué edad tienes? Luces como de once a?os, ?Cuál es tu comida favorita? Por tu complexión física diría que es el sushi, ?Lincoln te trajo por obligación para presumirte o tú lo convenciste de que te trajera? Adivino que puede ser la segunda opción, Number One, por lo que vi de él, no parece ser de ese tipo de persona ?Dios mío que adorable eres! – Y así, continuo para lo que Yumiko era una tortura con Luz preguntándole una cosa para luego contestarse, independientemente de que acertara o no.

Afortunadamente para los recién llegados, llegaron más miembros de los Avanged Sevenfold. En específico, Dipper y Finn, quienes literalmente cayeron del suelo frente a ellos, atrayendo la atención de los demás. Yumiko fue la única que se sobresaltó por el susto.

-No te preocupes, cari?o, esos dos no muerden, tan solo son algo cabeza dura, en especial ese rubio estúpido – Se?alo a Finn.

-Oye, oye, oye, apenas voy llegando y tratas de menospreciarme frente a alguien que recién conozco, eres toda una bruja – Dijo Finn acercándose a Luz. Esta se encogió de hombros.

-Eso no quita que sea verdad lo que dije – Le respondió.

-Y yo nunca negué que así fuera, pero solo para que sepas, peque?a. Esa bruja que tanto dice cosas de los demás a sus espaldas o de frente a ellos, sigue mojando la cama – Se?alo a Luz mientras tomaba del hombro a Yumiko. Esta no respondió y se mantuvo nerviosa, y más nerviosa cuando miro la sonrisa de Luz desaparecer.

-?Idiota! Sabes que eso es por mi fisiología, es algo que no puedo evitar, y ni siquiera me orino – Le reclamo Luz.

-Eso no quita que mojes la cama, da igual que te orines o no – Finn sonrió burlonamente, sintiéndose satisfecho de haberle regresado la burla a su compa?era.

-?Bastardo cabeza de piedra! – Le insulto Luz molesta mirando a otro lado.

-Mojigata mojada – Y exactamente, Finn tuvo la misma reacción infantil. – Por cierto, ?Cómo te llamas? ?Quién eres? ?Y qué haces aquí? – Le preguntó a Yumiko mirándola curioso.

-Ella se llama Yumiko ?no, tiene once a?os, le gusta el sushi, y el number one la trajo consigo – La que respondió fue Luz.

-Si, pero quién… – Miro a Luz, esta conocía lo que seguía.

-Entre más me la mamas más me crece – Respondió ella.

-?Hey! Para eso tienes que decir el número que da doce más uno. Y no tiene sentido de lo que dije – Le respondió Finn, no le sorprendía que no cayera en el clásico "si, pero quién", pero lo que le respondió no tenía sentido.

-Sí, lo sé, pero tú empezaste – Esta vez le dio la espalda, refunfu?ando de manera infantil.

Yumiko solo guardó silencio, sin saber exactamente como intervenir.

Mientras por parte de Lincoln, ahora se encontraba lidiando con otro imbécil.

-Oye, ?acaso te dijimos que este lugar era guardería o una productora ilegal? – Le dijo Dipper, burlándose de él, luego de escuchar todo el escandalo por parte de Luz y Finn.

-Mira, porque no mejor me chupas la polla, al cabo que te gustar estar de mamador – Respondió Lincoln.

-No mames, te aviso que ese pendejo, sí te la chupa sí se lo pides – Marco no desaprovecho la oportunidad para molestar también a Dipper, quien claramente, se irrito por ambos comentarios.

-?Jodanse! – Les insulto Dipper.

-Ya, ya, mira, ahorita te doy una pomada para que te la untes y se te pase el ardor – Para desagrado absoluto de Dipper, Gaz también parecía tener ganas de molestarlo.

-??Tú también?! – Exclamo Dipper.

-Claro que no, yo no tengo polla para que chupes – Ante esa respuesta tanto Lincoln como Marco se echaron a reír a carcajadas.

-?Maldita sea, Gaz, deberías unirte más a menudo! – Comento Marco entre risas. Antes de que la cosa se pusiera más caótica, la líder del grupo entro en escena.

-?Qué ocurre aquí? – Dijo Connie mientras salía de la casa con una ceja alzada.

-Lincoln trajo a su novia/a una humana/a una amiga – Fueron las múltiples respuestas que dieron el resto de miembros salvo el albino. El cual solo dio un suspiro.

Connie miro fijamente a Yumiko quien se puso aun más nerviosa, pues la mirada que Connie le estaba dirigiendo era una de seriedad absoluta.

-?Ay que linda es! – Exclamo la chica acercándose a Yumiko con una sonrisa, perdiendo toda la seriedad anterior y sacándole un buen susto a Yumiko.

-??Verdad que sí es muy linda?! – Comento Luz detrás de Connie.

Lincoln suspiro, esta situación parecía que se iba a volver eterna.

-Bueno, como sea, ya hablaremos de esto más a fondo a dentro, así que ya no perdamos más tiempo – Dijo Connie entrando a la casa y siendo seguida por el resto.

O quizás, no tan eterna.

Ya dentro de los pasillos, Luz se acercó a Yumiko la cual iba al lado de Lincoln.

-Oye, no has hablado mucho, vamos, sé que tienes cosas que decir o que preguntar, siéntete libre de hacerlo, ahora no tenemos hambre, así que ten más confianza – Le dijo Luz con una sonrisa a la ni?a.

Ella miro a Lincoln el cual solo le hizo una se?a de: "Adelante, sino para que me hiciste traerte hasta aquí" o algo así entendió Yumiko.

-Pues… para empezar… ?Cómo se llaman? ?Qué nombre tiene su especie? ?Todos tienen poderes distintos? ?Cuántos a?os tienen? ?Son de la tierra o del especio? ?Cuántos de ustedes hay? ?Tienen alguna dieta especial en base a sus poderes o algo así? ??Hay alguno de ustedes con poderes de insecto?! – Fue el mar de preguntas que le cayeron a Luz, una vez Yumiko agarro suficiente confianza.

-Wow, wow, wow, más despacio chica, no vayas preguntarme el origen del universo. Una a la vez – Esta vez fue Connie la que le respondió.

-Vale, lo siento… jeje – Se rio nerviosa. Tomo aire y continuo. – ?Cómo se llama su especie? – Fue la primera pregunta.

-De forma oficial, no es que tengamos un nombre como especie, pero de momento, lo único que te podemos decir es que somos algo así como ángeles – El que respondió fue Finn.

-Bueno, algo así me dijo Lincoln, solo quería confirmación para poder llamarlos como tal – Guardo silencio por un momento. – ?Todos tienen poderes distintos? – Volvió a preguntar.

-Sí, pero más bien, es fisiología distinta, nuestro organismo no es igual, cada uno estamos dise?ados para poder tener ciertas habilidades – Respondió Dipper.

-Ya veo, entonces… ?Qué es lo que los hace de la misma especie? – Preguntó.

-Tres razones: La primera, que tengamos aparentes tatuajes con números en serio y nombres de ángeles y ángeles caídos/demonios. En segunda, nuestras habilidades superiores a la del resto de seres vivos. Y tercero, porque solo nosotros nos podemos matar a golpes y sobrevivir – Contesto Gaz.

-Vale… Y en base a eso… ?Cada uno come distintas cosas en base a sus poderes? – Pregunto.

-Sí, comemos lo que nos gusta, y no comemos lo que no nos gusta. No hay mucha ciencia, no es como si yo me pusiera rumbo a una tormenta eléctrica a comerme los rayos que de ahí puedan caer… aunque algún día debería intentarlo a ver qué ocurre – Le respondió Marco y de paso, anoto algo que hacer este fin de semana.

-Ya… a ti no te he visto comer cosas que no sea comida normal, o bueno, comida humana – Dijo mirando a Lincoln, quien se encogió de hombros.

-Ya te lo dije, no necesito estar bebiendo sangre 24/7 para sobrevivir, de hecho, creo que no he bebido sangre como tal… – Lincoln mintió, la primera vez que recordaba que despertó sus poderes, también bebió o, mejor dicho, absorbió la sangre de ese asaltante. Ahora que le venía ese recuerdo a su cabeza, recordaba como se sintió con más energía, incluso, más fuerte. Quizá… debería intentarlo la próxima vez que vaya por ahí.

-Eso sería divertido y delicioso – Bloody se rio entre dientes.

-Bien, peque?a… espera, nunca me dijeron tu nombre, ?verdad? – Le pregunto Connie mirándola, a lo que esta negó.

-No, al menos, yo no me presente, soy Yumiko ?no, y pues… soy la mejor amiga de Lincoln – Esto último lo susurro apenada. No obstante, todos los ángeles tenían un extraordinario oído, por lo que Connie le entendió perfectamente.

-Maldita sea, ahora eres más adorable que antes – Dijo Connie encantada con la ni?a. – Muy bien, Yumiko, espéranos aquí, nosotros vamos a discutir unas cuantas cosas – Le dijo mientras se?alaba a un cuarto.

-?Pero ese es mi cuarto! – Se quejo Dipper. Pero Connie hizo caso omiso a su queja. Pero de forma inesperado, del cuarto de Dipper salió una somnolienta Demencia.

-Buenos días – Saludo mientras se frotaba los ojos.

-?Qué hacías en mí cuarto? – Le pregunto Dipper a la peliverde.

-Durmiendo, duh, por cierto, cámbiate de colchón el que tienes es horrible – Tras decir eso, noto a Lincoln. – ?Oh! Esperma ya está aquí – Dijo con mejor ánimo.

-?Esperma? – Se pregunto Lincoln por ese nuevo apodo.

-?Y esta carne fresca? – Esta vez su atención en Yumiko, quien se sintió intimidada.

-Es la mejor amiga de Lincoln – Le contesto Connie. Ante esa respuesta, Demencia solo entrecerró la mirada, intimidando más a la pobre chica. Todo para luego sonreír y acercársele en un parpadeo.

Literalmente, Yumiko parpadeo en ese momento y al abrir los ojos tenía a la chica frente suyo.

-Sí eres la mejor amiga de Esperma, ?entonces también seamos amigas! – Exclamo levantándola del suelo con mucha facilidad.

-S-Sí, está bien – Respondió nerviosa.

-Ya bájala, Demencia, ven con nosotros que hay varias cosas que las que tenemos que hablar en grupo – Dijo Connie.

-?Pero aun tengo cosas que preguntarles! O bueno, mejor dicho, ??Por qué me dicen todo tan fácilmente?! – Esa era la pregunta que más inundaba su mente una vez le contestaron todo lo que preguntaba de manera tan fácil.

-Por que no representas una amenaza real para nadie aquí – Esta vez fue el propio Lincoln quien le respondió. Yumiko lo comprendió.

-Ya veo…

-No es solo eso, a parte, es porque bueno, eres mejor amiga de uno de nuestros nuevos miembros, quizá no tengamos mucho tiempo de conocer al número uno, pero… si quieres empezar bien, vamos a confiar en él, tanto como esperamos que él confié en nosotros – Respondió Luz tranquilamente con una sonrisa mirándolos a ambos.

Eso sorprendió a Lincoln, honestamente, esperaba que dijeran algo como que, sin importar lo que le dijesen no podrían escapar de ellos.

-Y porque honestamente, dudo que puedan escapar de aquí con todos nosotros detrás de ustedes – Agrego Gaz. A lo que Lincoln, honestamente, hasta se sintió aliviado de que le dijeran eso.

-Bueno, como sea, solo espéranos mientras terminamos de hablar y así nos conozcamos mejor los unos a los otros, ?te parece? – Le dijo Connie a Yumiko, la cual, por instinto, miro a Lincoln.

-Esta bien, haz lo que dicen, tú confía en mi – Le respondió Lincoln con una sonrisa confiada.

-De acuerdo, solo no tarden demasiado – Dijo mientras entraba al cuarto de Dipper, para molestia de este.

-Nos vemos en un rato, ratoncito – Se despidió Luz de Yumiko.

-?Ratoncito? – Se pregunto para sí misma una vez se quedó sola.

Una vez dejaron a Yumiko atrás, se reunieron exactamente donde Lincoln despertó la primera vez que estuvo aquí.

-Bien, honestamente, no esperaba que trajeras a alguien, Lincoln – Le comento Connie al albino.

-Ella insistió demasiado y se pone demasiado molesta si le digo que no – Respondió Lincoln encogiéndose de hombros.

-Ella es adorable, me encanta – Comento Luz.

-No habla demasiado, me agrada – Comento Gaz.

-Sí es amiga de Esperma, es amiga mía – Comentó Demencia mientras se servía un poco de jugo.

-Tienes los huevos que a este le faltan – Comentó Marco se?alando a Dipper.

-No puedo decir una opinión en concreto por ahora – Dijo Dipper molesto.

-Estoy igual – Dijo Finn.

-Bueno, independientemente de cuales hayan sido las impresiones de cada uno respecto a nuestra inesperada visitante, vamos a lo que vamos – Connie puso orden.

-?Y bien? ?Qué tienes para nosotros esta vez? – Le pregunto Gaz a su líder.

-En realidad, es para los nuevos miembros para los que les tengo algo guardado – Dijo Connie mirando al albino y a la peliverde.

-Nos darás porno infantil o algo así – Comento Demencia sin prestar demasiada atención.

-Sí ese es el caso, mejor no me des nada – Comentó Lincoln cruzado de brazos.

-Claro que no tarados. Solo escuchen. Les tengo voy a encargar su primera misión como grupo, o bueno, dúo, pero precisamente, la misión que les voy a dar es para que pasen de dúo a trío.

-Rico – Dijo Demencia.

Ignorando ese comentario, Connie prosiguió. – Recientemente, he estado investigando a una chica al sur-oeste de la ciudad, y estoy completamente segura de que es una de los nuestros. Y la misión que quiero darles es que vayan y den el primer contacto con ella. Ya sea que la recluten, lo cual es lo más preferible, como que no quiera formar parte de nuestro grupo, lo indicado es que todos la conozcamos – Explico.

-Muy bien, ?y dónde encontramos exactamente a esta chica? – Pregunto Lincoln interesado.

-Ella trabaja en el centro nocturno de "Lone Digger". Y solo les puedo adelantar un poco que ella es… muy rápida, la reconocerán fácilmente, ella sin duda deslumbra bastante – Connie sonrió cual cómplice a la hora de planear un atraco.

-?Y es sexy? – Pregunto Demencia.

-Bastante – Respondió.

-?Eso es un plus!, ?No lo crees, Esperma? – Celebro Demencia.

-Supongo que sí – Respondió Lincoln con una sonrisa similar a la de Connie.

-?Perfecto, no tardamos casi nada en entrar en acción! – Exclamo Bloody ansioso de acción.

-Para dar otros datos, obviamente, trabaja por la noche en el "centro nocturno", así que irán una vez sea su turno, ella trabaja en un horario de entre diez de la noche a tres de la ma?ana, que es cuando cierra el centro, da igual sí están antes o después de que lleguen, la cosa es que tengan contacto con ella y la traigan aquí – Termino de explicar Connie. – ?Ah! Una cosa más… como ya me lo veo venir, no vayan a destrozar todo el barrio como hicieron en ese club clandestino, ?quieren? – A?adió. – Tampoco es de nuestra intención que todos sepan que existimos, de momento, eso no nos beneficia en lo absoluto.

-No prometo nada – Declaro Demencia con una sonrisa maniaca.

-Haré lo que pueda – Dijo sin más Lincoln, tanto él como su otro yo tenían una emoción que se reflejaba en sus sonrisas.

La sola idea de poder volver a pelear con otro como ellos hacía que su sangre se alterara de la emoción. Sin duda, esta sería una noche muy divertida.

~0~0~0~

Lincoln suspiro. Estaba aburrido, muy aburrido, aun era temprano, cerca de las nueve de la ma?ana, era sábado, así que no había tanta gente, por lo que buena parte de la calle se encontraban semivacías.

Lincoln se encontraba dando un paseo, tenía en mente ir al arcade a jugar, pero no abrían tan temprano. Lo normal era que esperase dentro de su departamento o se durmiera, pero Lincoln no tenía sue?o y no le gustaba estar tanto tiempo en su departamento, principalmente porque no tenía ni televisión ni Internet para matar el tiempo, así que era mejor dar un paseo.

La tranquilidad del pueblo era reconfortante, bastante reconfortante, antes estaba más que acostumbrado al constante sonido de los coches pasar tanto en la ma?ana como en la madrugada. Ahora solo había unos pocos carros pasando o uno que otro grupo de ciclismo.

?l debía de ir a trabajar otra vez a la casa Loud, pero eso era en la tarde y para eso todavía quedaba.

-?Qué podría hacer con ellas? – Murmuro pensando en el resto de las hermanas Loud. Lo único que buscaba era que lo respetaran lo suficiente para que siguieran sus instrucciones y no causen problemas, no tenía ni la intención de ser su amigo o algo similar. Podría considerar coquetear más con Leni, pero teniendo a tantas hermanas por ahí interrumpiendo o espiando arruinaban un poco la experiencia.

-En lugar de estarnos espiando, mejor espíen a su puto vecino senil – Comento Bloody. Ya llevaban cierto tiempo trabajando de ni?os, y desde que se enemistaron con Luna, el resto de hermanas con las que no interactuaba o de plano lo despreciaban comenzaron a estar más pendientes de él, aunque a larga distancia y eso resultaba muy molesto.

A Lincoln le daba igual si lo tuvieran vigilado, ahora con la cerebrito de Lisa interesada, o, mejor dicho, obsesionada con vencerlo en el ajedrez era más constante, pero esperaba que por lo menos alguna se animara a hablarle por voluntad. Eso sería más sencillo ya para organizar un plan más efectivo. Pero sí él se les acercaba lo único que sabían hacer era gru?irle o no decirle nada relevante o interesante.

Al menos las gemelas, Lisa y Lily hacían las cosas un poco más entretenidas, aunque, sería mejor si la chica gótica se le volviese a acercar para conversar un rato, pero ahora la chica se había vuelto más distante. Sin duda, era un bicho raro, primero le ayudaba y luego le daba la espalda.

Luego de estar caminando y meditando por un rato, se percato que se encontraba cerca de un lugar que antes no había visto en Royal Woods. El albino se tomo con calma lo de conocer todo el pueblo, no tenía prisa alguna para conocerlo por completo, así que había lugar que aun no visitaba. Y este era uno de ellos.

Justamente al otro lado de la calle, había un centro deportivo. No era nada espectacular, y de no ser porque escucho algo que le llamo su atención se hubiera marchado de ahí.

-Este latido… me es familiar – Murmuro nuevamente para sí mismo, tratando de recordar a quien le pertenecía ese latido.

-Es la enana – Dijo Bloody, haciendo que el cerebro de Lincoln se iluminara.

-Lynn, eh. Es esperable verla en un lugar como este – Guardando silencio por un momento, meditando sí ir de chismoso o no. – Bah, no es como si tuviera algo mejor que hacer – Con eso dicho se encamino a la entrada del lugar.

Ahí una se?ora le cobro un dólar la entrada y entro tranquilamente al lugar.

Era en su gran mayoría un gran campo para correr, principalmente dedicado a los maratonistas, pero por ahí miro a varias personas correr por ahí. Caminando un poco, logro ver que justo dentro del circuito, había otra pista dedicada enteramente a las carreras de atletismo, los 500 metros. Por los costados había unas cuantas gradas para los espectadores por lo que decidió sentarse ahí. Mientras caminaba, noto que más adelante había múltiples canchas de basquetbol y voleibol, la gran mayoría estaban vacías. También noto que más delante también había otro gran campo donde podía ver a varias chicas haciendo lanzamiento de disco y algunos otros practicando tiro con arco. Mirando en otro lado, y gracias a su visión inhumana logro ver que también había un peque?o gimnasio, era sin duda lo más pobre de todo el lugar, pero era decente.

Ya estando sentado en las gradas, noto como dentro de la pista de los 500 metros se encontraba Lynn. Usando el mismo atuendo de siempre. – ?Acaso no tiene más ropa a parte de esos pantaloncillos y esa camisa apestosa? – Pregunto Lincoln para sí mismo.

-Tal parece que es otro de esos rituales de buena suerte de la que hablaron las mocosas – Y precisamente, su otro yo le respondió.

-Pensaba que estarían exagerando con esos rituales, pero tal parece que no – Miro como Lynn parecía hacer más ejercicios de calentamiento que era bastante extra?os. Pero como el resto de sus compa?eras y su entrenadora no dijeron ni se extra?aron por eso podía deducir que ya estaban más que acostumbradas.

-Sí que es enana – Volvió a comentar Lincoln. Mirandola mejor, era la más peque?a de su grupo, y no por poco, se notaba que el resto le sacaban como doce o veinte centímetros de altura.

-Puta hobbit, nada más le hacen falta las orejas y los pies peludos y definitivamente es una hobbit – Se burlo Bloody.

Lincoln no se río, pero sí que se formo una media sonrisa por ese comentario, pero se dedico a obsérvala mejor. Escucho con atención sus latidos, su pulso, sus extremidades estirarse, incluso sus huesos crujir.

Rápidamente tuvo una perfecta visión de su cuerpo. Pero para tener más claridad, uso sus poderes causándole un peque?o rasgu?o a Lynn uno tan insignificante que ella confundió con una picadura de mosquito, pero fue lo suficiente para sacarle una gota de sangre. La gota se dirigió hacía él sin que nadie lo notara y se poso en su dedo índice. Lincoln se llevo su dedo a la boca saboreando la sangre de Lynn.

-Esta más dulce de lo que esperaba, pero no me sorprende. Aquellos que tienen una buena condición física siempre tienen ese gusto dulce, los que no están tan saludables saben salados y ya de plano los que están jodidos saben amargos. Claro que esos sabores solo los distingo yo – Susurro Lincoln para sí mismo.

Lincoln guardo silencio y la observo. Lynn termino de estirarse, escucho a su entrenadora junto al resto de sus compa?eras, les dio unas cuantas instrucciones, y se posicionaron en las casillas. A Lynn le toco estar justamente en la última casilla. Su entrenadora dio el pitido de inicio y así comenzaron a correr. Claramente, había una diferencia de habilidad en cada una de las chicas, Lynn mantenía un buen ritmo y en un momento estuvo a la cabeza, pero casi llegando al final fue rebasada por otras tres chicas quedando en cuarto lugar.

Desde su asiento, Lincoln pudo escuchar el "?maldición!" que soltó Lynn recobrando el aliento. Posteriormente, la entrenadora les puso otros ejercicios que hacer y mientras estas lo hacían, Lincoln reflexionaba.

-Tiene buena condición, diría que es de las que mejor condición tienen de todo el lugar. El resto o son novatos o ya tiene cierto tiempo entrenando, pero puedo notar que Lynn es bastante más atlética que el resto, pero, su altura no le juega bien, más con esas piernitas que tiene, debe de hacer más esfuerzo para seguir el ritmo de las otras tres chicas que la vencieron, aunque, estas son más altas y puedo ver que tienen más experiencia – Analizo Lincoln. Podía saborear por su sangre que la genética no era un factor determinante en el hecho de que estuviera enana. Lori y Leni eran relativamente altas, así como lo podían ser sus padres. Había visto a Lynn lo suficiente desde que la conoció como para ver lo constante que era con su entrenamiento, así como podía ver lo glotona que era para alimentarse en las pocas veces que se había quedado a cenar con los Loud.

Solo había dos posibilidades; No descansaba lo suficiente o se forzaba demasiado. Incluso podían ser ambos.

-Esta la tercera opción también, gracias a su hermanita y sus "dulces" – Agrego Bloody.

-También es una posibilidad, quizá sea por eso que su sangre sea más dulce de lo normal. Tendría que revisar cuando tenga la oportunidad de entrar a su cuarto sin que molesten por respirar – En ese instante, Lynn finalmente se percato de la presencia de Lincoln, este solo sonrió socarronamente y la saludo con la mano.

Esa sonrisa flaqueo un poco y no pudo evitar rodar los ojos cuando vio como su rostro se transformo en una cara de enojo. Si las miradas matasen, Lincoln ya estaría más que muerto y desde hace ya rato. Vio como Lynn le dijo algo a su entrenadora, esta asintió y salió de la pista.

Primero la vio dirigirse al ba?o, no entro, pero se lavo la cara con el lavamanos que había afuera de estos. Una vez hecho eso, la Loud se encamino fúrica hacía él.

-Ahí viene… – Murmuro para sí mismo.

-Apostamos a que dirá: ??Qué diablos haces aquí, friki?! – Comento Bloody.

-??Qué diablos haces aquí, friki?! – Le encaro Lynn.

-Que dijimos – Rio Bloody.

-Pasando el rato – Fue la respuesta de Lincoln.

-??Acaso me estabas siguiendo?! – Le volvió a cuestionar Lynn mirándolo con desprecio.

-No realmente, vine aquí para ver el lugar y te vi entrenando, así que decidí ver un poco de tu entrenamiento ya que estaba. Por cierto, buen sprint en la carrera, aunque hubieras esperado más al final para hacerlo – Le dijo Lincoln, esa respuesta no pareció convencer a Lynn.

-?Agh! No únicamente tengo que aguantarte en casa sino también aquí o qué – Comento fastidiada. De paso ignorando el comentario final del albino.

-Oye, que conste que no me he metido a tu entrenamiento, solamente observo tranquilamente – Respondió Lincoln encogiéndose de hombros.

-Eso no deja de ser espeluznante cuando te le quedas viendo a una chica entrenar estando solo – Le respondió Lynn.

-Hey, no es mi culpa que no haya nadie más aquí con quien platicar, ni que fuera tu madre para hacer eso – respondió Lincoln.

Lynn solo frunció el ce?o, pero justo cuando iba a decir algo más, otra voz se escuchó.

-?Oye Loud, deja de coquetear con ese chico y regresa a entrenar! – Fue la entrenadora de Lynn la que le grito llamando la atención del resto de sus compa?eras, quienes vieron a la Loud con un chico bastante apuesto hablando en las gradas.

-?No estoy coqueteando! – Respondió de vuelta Lynn.

-?No me importa lo que digas, solo quiero que traigas tu trasero de vuelta al entrenamiento!

-Uy, que rega?ada – Comento burlonamente el albino.

Eso le provoco un peque?o tic a la chica quien lo miro con una vena palpitante.

-Sí serás…

-?Loud que vengas aquí de una maldita vez! – Le volvió a llamar la atención su entrenadora.

-?Voy! – Dijo bajándose de las gradas, pero se volteo a ver a Lincoln. – Tú ya deja de acosarme, maldito friki – Y con esa amenaza hecha regreso a la pista donde le recibió una molesta entrenadora que le puso a correr más vueltas como castigo.

Eso sin duda había sido divertido para el albino. Su sonrisa lo demostraba.

-Como sea, ya me aburrí, a ver que más puedo hacer – Comento Lincoln levantándose de su asiento, estirándose un poco, una vez se dispuso a irse una voz le grito.

-?CUIDADO! – Eso llamo la atención de los que se encontraban cerca, Lincoln escucho como algo se acercaba a gran velocidad, alzo la mirada y vio como un disco venía directamente sobre él. Lincoln lo vio claramente, y lo único que hizo fue dar un paso al costado y ladear la cabeza a la derecha. Así el disco golpeo contra los asientos de las grandas agrietando el lugar donde antes estaba sentado.

Lincoln solo tomo el disco quien también pareció haberse fracturado y miro como una chica fornida y un poco gorda venía hacía él.

-?Oh menos mal nadie salió herido! – Dijo la chica dando un suspiro.

-He de suponer que esto es tuyo, ?no? – Dijo Lincoln mientras le extendía el disco.

-Sí, lamento mucho eso, estaba practicando y creo que me maree y arroje el disco en la dirección contraria, lo siento mucho por eso – Se disculpo la chica.

-No te preocupes, fuiste tú la que me aviso a tiempo – Comento Lincoln restándole importancia.

-Bueno sí, pero menos mal tienes muy buenos reflejos, eh – Elogió la chica. – ?Vienes a entrenar aquí? Es la primera vez que te veo – Le pregunto.

-Gracias y no, es la primera vez que estoy aquí, no creo que venga seguido si te soy honesto, pero solo quería ver el lugar por curiosidad – Le respondió.

-Oh… bueno, lamento que tu primera visita haya resultado así – Volvió a disculparse la chica.

-Tranquila, supongo que es una buena anécdota. Total, creo que te están llamando por allá – Le dijo Lincoln apuntando a un hombre mayor quien parecía entre molesto y preocupado.

-Ugh, ya puedo ver el rega?o, bueno, debo irme, espero que puedas venir otro día, así te puedo invitar algo en compensación – Propuso la chica antes de marcharse.

-Lleva buena lencería e iremos – Comento Bloody.

-Lo pensare – Murmuro Lincoln metiendo sus manos en los bolsillos de su chaqueta y marchándose lentamente de las gradas. Sin embargo, noto como Lynn había observado toda la escena, ella y el resto de su grupo así que con una idea en su cabeza que le hizo sonreír.

Se detuvo y miro directamente a Lynn.

-?Nos vemos al rato, Lynndura! – Se despidió lo suficientemente alto tanto para que Lynn como el resto de sus compa?eras lo escucharan fuerte y claro.

-Con qué no estabas coqueteando, eh – Dijo la entrenadora de Lynn viendo marcharse a Lincoln, mientras que sus estudiantes se encontraban alrededor de Lynn haciéndole cientos de preguntas. Para el absoluto desagrado de Lynn.

~0~0~0~

Lincoln aun se encontraba riendo entre dientes por la peque?a broma que le hizo a Lynn. Estaba seguro que intentaría golpearlo una vez se vieran más al rato en la casa Loud, pero no era nada a lo que no estuviera acostumbrado.

Miro su celular, apenas eran las nueve y media, el arcade habría cerca de las doce de la tarde, así que aun quedaba rato para que pudiese ir. Viendo que su tiempo en el centro deportivo no mato el suficiente tiempo decidió seguir paseando más por el lugar.

Siguió caminando tranquilamente, no tenía ningún lugar en mente al que ir, luego de estar veinte minutos caminando sin rumbo, en cuanto menos se dio cuenta estaba en otro vecindario, este lucía bastante más… adinerado que el resto de vecindarios que había visto en el resto del pueblo.

Siguió caminando tranquilamente, hasta que escucho música, así como una gran cantidad de humanos reunidos, podía escuchar sus latidos claramente, en su mayoría agitados.

-Parece que hay una fiesta por allá – En efecto había una fiesta, por la cantidad de globos, el olor de colonias y perfumes junto con la risa de muchos ni?os, no era difícil darse cuenta que era una fiesta infantil.

En cuanto más se acercó, noto que la gran mayoría de invitados eran del mismo vecindario, al menos por la cantidad de autos estacionados cerca. No era complicado percatarse de ello, no necesitas ir en auto a un lugar que solo te queda a una cuadra o dos a no ser que seas arrogante o muy flojo.

Noto que donde se estaba dando la fiesta era en un a gran casa, la cual estaba completamente abierta y había una entraba que daba directamente al patio trasero que ese en verdad era el lugar grande, pues era donde la gran mayoría de invitados estaban presentes.

Como paso antes, se habría seguido derecho caminando, pero de no ser porque también reconoció el latido de uno de los tantos corazones en la fiesta.

-La payasita esta por ahí – Comento ya reconociendo que Luan se encontraba en la fiesta. – Cierto… la Sra. Loud comento algo de que tenía un trabajo o negocio de fiestas o algo así – Se detuvo pensando en la posibilidad de colarse en la fiesta.

No es que hubiera seguridad, de hecho, cualquiera podría entrar fácilmente, y no había nadie custodiando la entrada o algo parecido.

-Hay que ir, no es que haya otra cosa que hacer – Fue Bloody el que contesto, lo que termino de convencer a Lincoln.

-Tienes razón, lo peor que puede pasar es que nos echen y ya – Encogiéndose de hombros entro dentro de la casa. Tal como esperaba, nadie vigilaba que no entraran invitados no deseados. Los ni?os estaban más preocupados jugando entre ellos y los adultos se encontraban platicando entre sí, incluso, los que intuía que eran los adolescentes se encontraban dentro de la casa, incluso podía escuchar a alguien fornicando en una de las habitaciones de la casa.

-Menuda fiesta está montada – Se rio entre dientes, y aprovechando que había una gran mesa de dulces si dirigió ahí y tomo unos cuantos Doritos. Por no decir que tomo sin que nadie se diera cuenta la bolsa entera y se marcho a otro lugar. La gente estaba concentrada en otras cosas como para percatarse de un albino tomando una bolsa de frituras.

-Aprovecho y también me llevo esto – Murmurando se sirvió un poco de limonada. – Ahora sí, con esto ya se gana mi aprobación esta fiesta – Doritos y Limonada eran la segunda combinación favorita del albino. Simplemente, se sentó en una de las tantas mesas vacías a comer tranquilamente, mientras esperaba paciente que Luan apareciera en escena.

Le daba curiosidad ver cuantas de estas personas eran realmente invitados y no colados como él.

Tal como esperaba, al cabo de unos diez minutos, miro como organizaban a los ni?os para que vieran el show. Ahí, Luan se presento vestida con un traje de payasa contando malos chistes que sacaban varias risas a los ni?os y alguno que otro adulto que prestaba atención al show.

Lincoln solo la miro fijamente, podía notar como es que se encontraba calmada, no había nervios a la hora de realizar su acto, ni tampoco titubeos, se notaba que ya tenía experiencia en esta clase de fiestas, incluso sobrellevaba bien a un mocoso que nada más se la pasaba criticando, pero que era constantemente ignorado por el resto de ni?os.

Pasaron los minutos y el acto les gustaba más a los ni?os y parecía complacer a los adultos que podían ver a sus hijos disfrutar del espectáculo. Aunque Lincoln noto que había un hombre que no estaba prestando atención al show y estaba más pendiente mirando a los ni?os.

-Ahí está otro colado – Comento Bloody, claramente el hombre no iba vestido para la ocasión, pero pasaba desapercibido principalmente por su rostro fino y era junto con él, los más alejados del show. Lincoln podía sentir la palpable erección que el hombre tenía.

-En serio debería de cuidar mejor quien entra – Rio Lincoln entre dientes, pero ese no era su problema.

El show continuo por más tiempo, se notaba que Luan había preparado bien este show, incluso parecía conocer ya de antemano al cumplea?ero quien parecía ser el que más se divertía con sus chistes.

-Muy bien, ya como acto final, tenemos un desenlace que… – Fue en ese momento que Luan se percato de la presencia de Lincoln. En ese momento mirar los ojos rojos de Lincoln observándola atentamente con esa sonrisa divertida paro por un momento el corazón de Luan y sin querer se tropezó con su propio pie. Esto hizo el silencio en la audiencia hasta que Luan exclamo desde el suelo. – ?Les hará caerse de la risa! Jajajaja ?Entiende? – Para su fortuna, esa improvisación le salió perfecta a Luan quien logro que los ni?os se carcajearan por el remate.

Lincoln rio entre dientes, pues fue el único en darse cuenta de que ese tropezón fue por su culpa, o al menos, fue por que lo vio que se puso nerviosa. Ya lo que resto, fue Luan agradeciendo a la audiencia haciendo una reverencia y un mal chiste. Una vez termino con eso y los ni?os volvieron a jugar entre sí, que Luan se dirigió justo donde se encontraba Lincoln.

-Va a decir lo mismo que su hermana: ??Qué diablos haces aquí?! – Comento Bloody mirando como Luan se acercaba.

-??Qué diablos haces aquí?! – Le dijo Luan en voz baja sonando alterada.

-Comiendo Doritos y tomando Limonada – Respondió Lincoln tranquilamente. – Y, por cierto, Hola, ?qué tal tú ma?ana? – Saludo.

-??Cómo solo dices hola cuando te colaste?! – Le reclamo Luan.

-Hablas como si fuera el único, quiero decir, la puerta esta abierta, es problema de los demás ser tan liberales con su propiedad – Dijo mientras terminaba la bolsa de Doritos.

-?Te acabas de terminar una bolsa entera de Doritos tu solo? – Pregunto la casta?a.

-Sip

-?Cómo desayuno? – Volvió a preguntar.

-Sip

-?Es en serio?

-Claro que sí, si se me da la oportunidad la aprovechare, así de sencillo – Dijo mientras se levantaba de la mesa terminando lo poco que quedaba de limonada.

Luan negó con la cabeza.

-?En primer lugar por qué decidiste meterte aquí? – Otro pensamiento surco su mente cuando termino de formular esa pregunta. – Acaso… ?tú sabías que yo estaba aquí? – Pregunto nerviosa.

-Tal vez chi, tal vez ?o – Fue la respuesta de Lincoln. – Ahora sí me disculpas voy a lavarme las manos y seguimos hablando, ?te parece? – Dijo Lincoln alejándose al ba?o, pero regresando con Luan. – Por cierto, ?Dónde está el ba?o? – Pregunto con una sonrisa.

-Esta por allá

-?"Allá" dónde?

-Ugh, tú solo sígueme, total, también voy a cambiarme y los ba?os me queda de paso – Comento llevando a Lincoln dentro de la casa. Ahí, tal como Lincoln suponía había adolescentes, claramente ni?os ricos y alguno que otro más modesto con su vestimenta.

Otra cosa que noto el albino, es que alguno de ellos se quedaba murmurando entre ellos con sonrisas mientras veían a Luan pasar, e uno que otro también se fijó en él, pero más importante, notaba como Luan se apresuraba para salir del campo de visión de esos chicos. Restándole importancia a las miradas dirigidas hacía él, tomo nota de las miradas dirigidas a Luan, esta lo dejo en el ba?o, mientras que se fue a otra habitación a cambiarse.

Lincoln solo quería lavarse las manos, pero se tomo un rato para meditar un poco la situación.

-(Veamos… una chica que aparentemente es relativamente extrovertida, "aparentemente", pero que en todo este tiempo no la he visto hablar con nadie más que conmigo, varios de los pubertos la miraban y cuchicheaban entre ellos, mientras que Luan solo apresuró paso… agregándole que compartía esos antidepresivos con la rockera de cuarta… vaya, eres más fácil de leer de lo que esperaba, Luan Loud) – Ahora Lincoln tenía una visión mucho más completa de Luan. Aun le quedaban conocer ciertos detalles para completar esa visión, pero ahora, ya sabía por dónde iban los tiros.

-Mmm… parece que hay alguien esta muy emocionado por allá – Comentó Bloody. Lincoln lo sentía, había alguien sumamente alterado muy cerca de donde estaba Luan.

Por curiosidad, salió del ba?o, justo al final del pasillo había una ventana, así que con cuidado abrió la ventana, miro a la dereche y ahí pudo ver claramente al colado de antes, mirando a través de otra ventana con la "nutria" entre manos. Esa era justamente la habitación donde Luan se estaba cambiando.

Se acercó en menos de un segundo sin hacer ni una pizca de ruido hasta colocarse detrás del hombre, la ventana a la que estaba mirando estaba cubierta por unas cortinas, pero había un peque?o espacio donde se podía observar lo que había dentro. Y ese algo, era, en efecto, Luan en bragas colocándose sus medias.

-Viejo, en serio no iba a hacerte nada ya que no era mi problema, pero como esa chica esta bajo mi cuidado, se acaba de convertir en mi problema – Le susurro Lincoln al oído del hombre, quien se estremeció y justo cuando Lincoln termino de hablar se volteo bruscamente, pero antes de decir cualquier cosa, su boca fue cubierta por la mano izquierda de Lincoln, mientras que la derecha fue directamente hacía sus partes nobles.

Sin decir nada, ni esperar ni un segundo, Lincoln aplasto las partes nobles del hombre, que salpicaron de sangre la mano del albino, el hombre antes de que pudiera gritar del dolor fue silenciado cuando Lincoln no dudo en aplastarle la mandíbula resquebrajando parte de su cráneo, matándolo en el proceso.

Lincoln solo dejo caer su cuerpo al costado, y de inmediato la sangre del hombre salió de su cuerpo y se dirigió a Lincoln quien simplemente la absorbió hasta que el cuerpo simplemente se seco a tal grado de que se convirtió en polvo, solo quedo su ropa que en parte estaba ensangrentada. Nuevamente, miro su mano con la que le aplasto sus partes nobles y noto que aun quedaban ciertos rastros blancos. Lincoln solo se limpió con la rompas del difunto, las cuales tiro a un bote de basura cercano y regreso al ba?o para limpiarse las manos nuevamente.

-Ala, aquí no paso nada – Dijo Bloody con frialdad.

Justo cuando termino, Luan salió del cuarto ya cambiada con su atuendo normal, su camisa blanca con círculos amarillos, su falda amarilla, con las medias del mismo color y sus botas negras.

-?Entonces qué harás? ?Te quedaras aun a la fiesta o ya te irás? – Le pregunto Lincoln a la chica.

Luan no dijo nada por unos segundos, dudando si decirle o no, pero al final lo dijo de todas maneras.

-Me iré, ya cumplí con mi trabajo y solo iré por mi paga – Dijo Luan mientras cargaba consigo una mochila.

-Pues bien, te acompa?o, igual no pensaba quedarme por aquí por más tiempo – Esa respuesta pareció incomodar a Luan, pero solo asintió.

-Está bien… supongo – Dijo marchando a buscar a la madre del cumplea?ero.

De nueva cuenta, volvieron las miradas y los murmullos cuando pasaron por la sala llena de adolescentes, nuevamente, el patrón se repitió y Lincoln solo dio un bufido, esto cada vez confirmaba más lo que tenía en mente.

Salieron de nuevo a patio trasero donde Luan no tuvo problema en encontrar a la madre del cumplea?ero, una se?ora rubia vestida con un atractivo vestido rojo, demasiado atractivo para una fiesta infantil, pero Lincoln no era el que se iba a quejar de eso. La mujer estaba esperando a Luan.

-?Querida tu acto fue esplendido, te agradezco mucho tu trabajo! – Le dijo mientras le daba su paga. Antes de responder, Luan se puso a contar el dinero rápidamente, cosa que le hizo darse cuenta a Lincoln que probablemente era más astuta de lo que aparentaba y le saco media sonrisa.

Una vez, termino de contar el dinero. Miro a la mujer. – El placer es mío Sra. Jefferson, recuerde llamarme en caso de más fiestas – Le dijo guardando el dinero.

-Claro, cari?o, pero antes de irte dos cositas – Le dijo.

-?Qué cosas?

-Primero que nada, que esperes un poco en lo que te traen tu rebanada de pastel y tu bolsa de dulces y segundo… ?Quién es él? – Le pregunto mirando a Lincoln.

No obstante, antes de que Luan pudiera responder, Lincoln la tomo de la cintura y se acerco sonriente a la mujer.

-Buen día Sra. Jefferson, soy Lincoln, un amigo de Luan y vine para acompa?arla a casa – Este acto dejaron paralizada a Luan, principalmente por la libertad en la que Lincoln la tomaba de su cintura. La mujer se les quedo mirando, pero sonrió cual cómplice.

-Jajaja ya entiendo, sí que eres toda una jovencita divertida, Luan. Entonces bien, Lincoln, te traigo a ti también pastel y bolsa de dulces – Le dijo antes de marcharse.

En ese momento, Lincoln soltó a la tiesa Luan quien seguía toda dura por aquel contacto tan cercano.

-Si te tensas así te saldrá una hernia – Le dijo Lincoln mirándola.

-?Q-Q-Qué fu-fu-fue eso? – Dijo entre tartamudeos nerviosos.

-Tú solo sígueme el juego, no te estreses – Respondió tranquilo.

Al poco rato llego la Sra. Jefferson con lo prometido, despidiéndose de los chicos y estos largándose de la fiesta.

~0~0~0~

La caminata entre ambos rumbo a la casa Loud tenía toda la pinta de ser lo más incomoda del mundo. Eso desde la perspectiva de Luan.

La chica había sido advertida por Luna acerca de que ese albino no era normal. Con ver el tono y la seriedad con lo que se lo dijo tan inusual en su hermana, era claro que iba en serio esa advertencia.

De momento, por fuera Luan lucía tranquila, o eso era lo que ella creía, pues su cara de "tranquilidad" lucía más como una de incomodidad bastante notorio para el que la viese. Lincoln, por su parte, era plenamente consciente de esos nervios que Luan tenía consigo. Precisamente, era que para relajar la situación se encontraba haciendo conversación con la casta?a.

-?Ya habías trabajado con esa familia antes?, cuando te vi en tu espectáculo note que sabías lo suficiente del cumplea?ero como para que se estuviera riendo tanto con tus chistes – Comento Lincoln.

-Pues… más o menos, ya lo conocía a él y a su madre, pero no fue porque hubiera trabajado con ellos antes, fue en otra fiesta a la que ellos estaban invitados el a?o pasado y, bueno, los chistes que hice en aquella fiesta no eran muy distintos a los que viste, sencillamente ya tenía ubicado el humor que tenía el ni?o – Respondió.

-Ya veo… y viendo que fuiste lo suficientemente buena aquella vez, fue que la madre del ni?o se fijo en ti y decidió contratarte para la fiesta de su hijo.

-Sí, igual, aquella otra fiesta tampoco fue la primera vez que conocí a la Sra. Jefferson, la conocí hace ya dos a?os, en el taller de teatro de mi escuela, ya que su hija mayor estaba ahí conmigo.

-?Y sigue ahí?

-No, se cambió a una escuela privada el a?o siguiente que la conocí, igual, solo compartíamos el taller de teatro, la chica es un a?o menor que yo

-?Y sí la viste en la fiesta?

-Sí…

Al ver ese peque?o silencio que se formó, Lincoln intuyo que probablemente la chica pertenecía a ese grupito que cuchicheaban entre ellos.

-Por cierto, según escuché de tu madre, tienes un negocio de fiestas, ya pude verlo en acción hace rato, así que mi pregunta es: ?Qué tan frecuente te contratan para una fiesta?

-Normalmente dos o tres veces al mes, ya llevo unos cuantos a?os haciendo esto, así que ya la gente de ciertos vecindarios me ubica.

-Eres famosilla, eh.

-Mmmmm… no te sabría decir sí lo soy o no, supongo que seré conocida entre las madres que buscan un espectáculo para su ni?o o por…

Luan se cortó a la mitad de la frase, dándose cuenta de que estaba por decir algo más privado. Sin embargo, a Lincoln no se le hizo complicado entender que otro grupo.

-Supongo que también lo eras con todos esos chicos y chicas de dentro de la casa, ?no?

Luan guardó silencio, Lincoln pudo darse cuenta de que había acertado su suposición.

-Ya veo, ya veo, un tema feo, lo entiendo. No te preocupes, no preguntare – Le dijo Lincoln tranquilamente.

Luan no respondió, pero internamente agradeció ese gesto.

-Como sea, de casualidad sabes ?por qué esa familia hizo una fiesta tan grande tan temprano?, quiero decir, ya son los once – Volvió a preguntar.

-Solo sé que querían hacer otras dos fiestas por la tarde y por la noche.

-Dios mío, que asco me acaban de dar. Como es eso de tres fiestas celebrando lo mismo en un mismo día, que tan solo digan que todo el día están de fiesta – Se quejo Lincoln.

-Sí, pero yo no me meto con eso, son cosas de ricos, aunque… bueno, según Lori, una compa?era de la preparatoria llamada Carol Pingrey hizo algo similar hace un a?o.

-Vaya, con que me digas que hubo policías me puedo hacer una idea de que tan buena estuvo la fiesta – Lincoln se rio entre dientes, chicas de la misma edad que la adicta al celular y con el aparente dinero suficiente como para hacer esa clase de gastos sonaba a una anécdota más que divertida.

-Sí, bueno, Lori estaba furiosa, ya que justamente ella planeaba hacer una gran fiesta, pero la de Carol termino por opacar completamente a la suya y pues… ya sabrás, a Lori nunca le agrado esa chica, de hecho, era la más popular de toda la preparatoria.

-Sí, ya puedo hacerme una idea de como es, y de la buena envidia que tu hermana tenía.

-Ya, una vez compitieron en una lucha de likes, y ya te imaginaras quien gano cuando Lori estuvo de cascarrabias por lo que resto de semana.

-Me la pones complicado cuando siempre está de cascarrabias – Ante ese comentario, Luan se rio ligeramente.

-Supongo que tienes razón – Todo parecía indicar a que podrían conversar fuera de ese aíre incomodo que Luan traía consigo, así parecía hasta que en la esquina vieron a Lynn, quien también alcanzo a percatarse de que ambos venían.

-Joder, nos topamos con la maldita ogra – Dijo Bloody sarcásticamente.

Al momento de mirarlos, Lynn no pudo hacer otra cosa más que fruncir el ce?o, frunciéndolo aún más cuando Lincoln le dedica una de sus sonrisas socarronas dedicada a irritar a Lynn, cosa que consiguió de inmediato.

Apretando los pu?os y chasqueando la lengua recordando la peque?a broma del albino, por la cual, ahora sus compa?eras no pararían de molestarla por quien sabe cuánto tiempo.

-Hola de nuevo, Lynndura – Saludo Lincoln frente a una enfurecida Lynn.

-?Pedazo de imbécil, te voy a tumbar todos los dientes de tu tonta cara! – Amenazo Lynn.

-A mi también me da gusto verte por segunda vez hoy – Comento Lincoln encogiéndose de hombros.

-?Ustedes… ya se había visto… hoy? – Se ánimo a preguntar Luan, quien ahora había vuelto a esa incomodes de antes.

-Hace no mucho, en realidad, fue antes de la fiesta, me la encontré en un centro deportivo entrenando atletismo y ya sabrás como se puso cuando me vio.

-??Estabas acosándome?! – Acuso Lynn

-Disculpa, pero eso no es un lugar público y tenía curiosidad de verlo, que te encontrara ahí fue simple casualidad – Se defendió Lincoln.

Luan solo intercambio miradas entre ambos sin saber que pensar.

-Bueno, como sea, por lo visto ya terminaste tu entrenamiento matutino, y te vas a casa. Curiosamente, también hacemos lo mismo, así que… iremos juntos – Dijo Lincoln con su ya acostumbrada sonrisa.

-?Qué te hace pensar que te acompa?are a ti?

-Pues… tenemos la misma ruta y claramente estas cansada, se nota que no tienes ganas de tomar una ruta más larga – Lynn trono la lengua, pues sabía que el albino tenía razón, su entrenamiento se volvió más intenso luego de la broma del albino, por la cual, ella tuvo que hacer más ejercicios por "distraer" al grupo en medio del entrenamiento. Aun le parecía ridículo.

-Tomare tu silencio a que me das la razón

-?Cállate! – Exclamo antes de cruzar la vereda.

-Tú hermana Lori no es la única que es una cascarrabias – Eso se lo comentó a Luan antes se seguir a Lynn. Luan se les quedo mirando incomoda, debatiendo si solo se debiese de cuidar del albino o de su propia hermana. Sacudió la cabeza y también cruzo antes que pasara un auto.

Caminaron por algunos minutos en completo silencio, pues había una clara tensión por parte de las dos hermanas. Lincoln pudo notar claramente las miradas discretas hacía su persona, así como las propias miradas de las hermanas entre ellas. Lynn no parecía ablandar la mirada hacía su hermana y Luan por su parte no podía mirarla a los ojos. Para el albino resultaba obvió que ellas dos no tenían precisamente la mejor relación de todas.

-Carajo, tírense un gas, aunque sea silencioso, que nos aburrimos – Se quejo Bloody, pues tanto él como su otro yo se comenzaban a aburrir de este silencio, ellos eran los únicos que estaban completamente relajados. Para ellos, la tensión e incomodes entre ambas hermanas, más que molesto, resultaba aburrido.

Lincoln miro el cielo, las nubes se encontraban más que presentes, no tenía pinta de que iba a llover en estos instantes, pero lucía a que iba a llover en unas horas. En ese instante, se le vino a la cabeza la canción de "Hymn For The Weekend" y comenzó a tararearla.

Ese era el único que se emitía dentro del peque?o grupo. Era curioso, esa canción le recordaba todos esos momentos dentro de los Avanged Sevenfold, desde las peleas, los viajes, las bromas y las orgías, precisamente porque era una canción que ponían seguido, lo suficiente como para aprenderse la letra en más de un idioma.

Sin embargo, ese tarareo irritaba de sobremanera a Lynn. Ni ella misma entendía porque escuchar ese tarareo le estaba resultando tan endemoniadamente molesto. De hecho, la respuesta era más sencilla para ella, no era la canción, era la persona. Para Lynn, Lincoln resultaba una persona molesta, arrogante, burlón, un imbécil en toda regla, uno que le sacaba de quicio, no importa donde fuera, siempre que alguien en casa lo mencionaba era molesto, cuando alguien en casa iba hacía Lincoln era molesto, cuando se divertían resultaba más molesto y el culmen de todo era cuando le dirigía una palabra.

Hoy no había sido un buen día para Lynn, su humor estaba de perros, y todo gracias a ese albino. En un impulso completo de furia apretó los pu?os y sin decir ni una sola palabra, golpeo en el rostro al albino.

Esa acción sorprendió y asusto a Luan, tanto por la acción tan inesperada de Lynn como lo expectante que se encontraba al ver que Lincoln no se había movido. No obstante, lo que sucedió la sorprendió. Ni siquiera Lynn se espero ver a Lincoln mirándola con una ceja levantada, sin ningún índice de dolor. La que sí estaba adolorida era Lynn, su pu?o había dado de lleno al rostro de Lincoln, pero se sintió como si golpeara a un trozo de metal.

Su pu?o estaba por más entumecido, sus mu?ecas y sus nudillos estaban ardiendo, y su rostro no ocultaba el dolor que ese golpe le había causado, así como la incredulidad.

-Vaya, ?no te gusta Coldplay? – Fue la única respuesta de Lincoln. ?l seguía con las manos dentro de los bolsillos, su rostro estaba intacto. Pero lo que hizo que Lynn se frustrara fue la mirada que Lincoln le dio.

Esos ojos tan rojos que hasta daban miedo, la miraban por encima de ella, era como ver a algo tan inferior que hasta daba lastima, pero Lynn también pudo distinguir… ?decepción?, esos ojos eran sumamente enga?osos, nadie que viera fijamente al albino a los ojos podría decir con exactitud lo que estos reflejaban. Así era como la deportista lo percibía.

No… esa mirada… esa maldita mirada… es la que siempre tenía a donde quiera que lo viera. Sin importar si él se encontraba con ella o con alguien más, esa mirada le enfermaba.

No podía saber lo que estaba pasando por la mente del albino. Su rostro había permanecido inmutable, no había signo de enojo o cualquier otra emoción, solo mantuvo la misma cara con la que había estado caminando desde hace rato.

-Sabes qué… voy a fingir que eso no paso, así que continuemos – Fue lo que se limitó a decir luego de aquel silencio que para ambas hermanas había sido eterno. Pero, así como dijo, continúo caminando tranquilamente tarareando la misma canción.

Luan por su lado, no podía más que reconocer lo que Luna le había dicho, ese albino era todo, menos normal. Aguantar como si nada un golpe de Lynn era algo inimaginable para ella, y para Lynn también lo era.

No les quedo de otra más que continuar siguiendo al albino hasta su hogar en completo silencio. Solo la tonada de "Hymn For The Weekend" fue lo que se escucho en todo el recorrido.

~0~0~0~

Finalmente, llegaron a la casa Loud. Ninguna de las dos hermanas dijo algo en todo el camino, y así también lo hicieron cuando llegaron. No hubo despedida, solo se apresuraron a entrar a casa sin siquiera despedirse, cerrando la puerta detrás de sí. Lincoln solo se quedo mirando la puerta de la casa.

-Eso estuvo… interesante – Susurro para sí mismo. No esperaba ese golpe de Lynn. No obstante, no estaba disgustado, al contrario, ya le parecía que se estaba tardando en querer golpearlo.

-Tuvo los ovarios suficientes, eso estuvo interesante de observar – Comento Bloody, una sonrisa maliciosa se formo en su rostro. Por consecuencia, Lincoln también sonrió, no maliciosamente, pero sí misteriosamente para el que lo mirase.

-(Esto sin duda es un avance más que interesante) – Pensó antes de tocar el timbre.

No tardo mucho en abrir Rita quien se miro sorprendida de tener al albino tan temprano.

-?Lincoln? ?Qué haces aquí? – Le pregunto.

-Hola Sra. Loud, pues… estaba pensando en que podría venir temprano al trabajo, ?le molesta?

-No, no, no, para nada, la verdad me sorprendes. Supongo que no tienes nada mejor que hacer.

-Y supone bien, mi estimada Sra. Loud – Eso hizo que Rita riera entre dientes.

-Bueno, no tengo problema en que vengas más temprano, mi esposo fue a trabajar desde hace rato y yo me iré en una hora, así que… ?te preparo un café o un licuado? – Pregunto dejando entrar al albino y cerrando la puerta detrás de él.

-No gracias, con un vaso de agua me conformo – Fue la respuesta de Lincoln.

-De acuerdo, te lo traigo para que podamos pla… – Fue interrumpida cuando sintió un jalón en su pantalón, volteando atrás, se encontró con Lisa.

-Disculpa la interrupción, Unidad materna, pero requiero la presencia del espécimen conocido como Lincoln para nuestra revancha – Anuncio Lisa.

-?Qué revancha? – Preguntó Rita confundida.

-Una revancha que quiere tu ni?a contra mi por haberle ganando en el ajedrez muchas veces – Ante ese hecho, Rita se sorprendió, no solo de que Lincoln hubiera vencido a Lisa en el ajedrez, sino también porque Lisa estaba interesada en otro ser humano.

Lincoln miro a la casta?a con grandes anteojos, se le notaba confiada, muy confiada.

-Tal parece qué tienes algo planeado para ganarme o no quedar muy humillada como la otra vez, eh – Comento Lincoln con una sonrisa.

Lisa solo se ajustó los lentes.

-En efecto, la vez anterior cometí muchos errores que te permitieron todas esas victorias. Sin embargo, he vuelto a analizar cada juego que tuvimos con mis cámaras de seguridad y ahora soy perfectamente capaz de predecir todas tus siguientes jugadas – Explico Lisa plenamente confiada en sus habilidades.

-Eso ya lo veremos, si nos disculpa Sra. Loud, si quiere yo voy por el vaso de agua – Dijo eso mientras ambos subían al segundo piso, dejando a una anonadada Rita. Poco después también se escucho el chillido de las gemelas.

Tras unas diez partidas que para la incredulidad de Lisa resultaron en pura derrota. Lincoln se encontraba pensativo, miraba como Lisa estaba completamente concentrada en el siguiente movimiento que debía hacer. Lincoln solo sonrió recargando su cabeza en su pu?o.

-Parece que la gótica nos mira también – Comento Bloody, tanto él como Lincoln se habían percatado que desde que llegaron habían sido observados por Lucy desde las sombras. Todo indicaba que pretendía acercarse a él en algún momento.

Rememorando todo lo sucedido hasta ahora, una media sonrisa se mostraba en el rostro del albino.

-(Creo que se me ocurrió algo… para "esas" tres) – Con una peque?a risa interna, el albino tenía claro los siguientes tres pasos de su plan.

~0~

New cap baby.

Tengo que admitir que, para este capítulo, no se me ocurrieron muchas super interesantes a mostrar, por lo que es un capítulo muy chill, claro, al menos por mi parte, ya que al pobre Lincoln tuvo a Lynn gru?éndole como perro y a Luan lista para huir de él.

De igual manera, le tocará acostumbrarse el albino, pues de momento se convertirá en una costumbre cuando este con esas dos, de momento, claro está.

Poco a poco voy cocinando todo a fuego lento, inclusive como peque?o adelanto, para el nuevo plan de Lincoln, aparte de hacer algo para Lynn y Luan, pensé en meter a Lucy… aunque claro, creo que sí lo hago el cap terminaría siendo muy largo, si así es, pues podría postergar a Lucy o alguna de las otras dos. Ya saben, porque también tendré la pelea que se viene en el flashback o un plan para cada una también estaría bien, así desarrollo más a una hermana. Ya lo veré yo de momento.

Btw, me tome la molestia de contar la cantidad de personas que votaron por cuál de todas las hermanas Loud, Lincoln tendrá algo mucho más profundo y la cosa va así…

Lori – 0

Leni – 2

Luna – 2

Luan – 0

Lynn – 2

Lucy – 3

Lana – 3

Lola – 3

Lisa – 0

Lily – 0 (La neta me espantaría si alguien hubiera votado a Lily ._.)

Claramente, las más dominan, son las que más interacciones han tenido con Lincoln, ósea, las gemelas y Lucy, aunque bueno, todavía le falta interactuar más con el resto de hermanas Loud, así que las cosas podrían cambiar, sorprender a alguien y a otros no tanto, pero ustedes saben, la magia de actualizar una historia… cada 3-4 meses, pero actualizarla XD

En todo caso, se valdrá cambiar su voto, so… don?t worry be happy.

En fin, la neta solo quería comentar eso, ahora pasemos a los reviews.

Reviews:

BlakeNova: Supongo que ahora se podrían agregar… bueno, no realmente, dejemos la lista de personas que le hablan a Lincoln como estar por ahora XD

Gracias, espero que este capítulo te haya gustado.

Un saludo.

Simm36: Gracias por tus cumplidos, espero que este capítulo te haya gustado.

Un saludo.

RCurrent: Fue más divertido para mi escribirlo. Como viste fueron Luan y Lynn a las siguientes a los que el albino les echo el ojo, aunque sea en, por así decirlo, versión beta para su próximo plan. Espero que te guste este capítulo, bro.

Un saludo.

Hisworld39: Hello there, ?Cómo has estado? Hacía tiempo que no te veía comentar nada, me alegra que te pasaras a dejarme dos reviews, no importa que sean largos o relativamente cortos, se agradece de todas maneras.

Ahí te vi atento en ese comentario respecto a que sí Lincoln tiene algo de que preocuparse que pueda afectarle, muy bien ahí, estrellita en la frente. Ahora… la respuesta a eso es sí… pero a la vez no. Ya lo verás conforme avance el fic.

En teoría, es la raza perfecta, pero aún tiene ciertos… inconvenientes que la vuelven imperfecta, no quiero sonar repetitivo, pero entre más avance el fic, más se verá esa imperfección, pues ten por seguro que Lincoln la va a cagar en ciertos momentos del fic.

Gracias y espero que disfrutes este cap.

Un saludo.

Xandra19: El destino de Yumiko ya se sabrá a su debido tiempo, por el momento disfruta a la peque?a ni?a… wow, eso sonó muy mal XD

De hecho, también lo imagine así, y por tanto, Luna subió las escaleras en modo tortuga canonicamente en este fic XDDDD

Gracias, espero que te haya gustado el cap… y con respecto a mi graduación, la disfrute… hasta que llego la universidad y acabe cumeado en el piso como Yamcha :'v

Un saludo.

Eso sería todo por mi parte, y bueno, me iré preparando para todo lo que tengo que hacer con el nuevo shot de Amphibia.

Se despide Dark-Mask-Uzumaki.

Bye~