09

Se escuchaban los murmullos de los consumidores, mientras disfrutaban un espectáculo de música instrumental cuando la pareja ingresó al establecimiento. Ambos observaron la decoración costosa y el tipo de vestimenta usado durante su estancia.

Piers pudo percatarse de la elegancia que recorría cada rincón provocando recuerdos de sus citas nocturnas con Matt al visitar los lugares de alto costo, nunca pensó revivir el pasado a lado de un antiguo amor. Intentó contener las lágrimas en su interior cambiando su pensamiento a los temas de conversación que tendría en la velada; al contrario, Chris buscaba la mesa asignada durante la reservación hecha el día anterior.

—Sígueme —susurro Chris, en el oído del joven

Piers siguió la indicación.

—No debiste traer a un restaurante costoso —replicó Piers

En el pasado Piers so?aba en tener su primera cita en el Restaurante Raccoon en compa?ía de su amor platónico al aceptar su propuesta de ser novios, sin embargo se vio afectado con el pasar de los a?os buscando adaptarse al presupuesto tenido ya que, en aquella época Piers no consideraba los altos precios.

—Es tu sue?o cenar a mi lado —dijo Chris, quitó un letrero con el título "reservado para Christopher Redfield'' y lo acomodo a lado de un florero. Había conseguido beneficios dentro de la estación de policía, por lo que, decidió aprovecharlos—. No me digas que has cambiado, Piers.

El joven soltó una risa nerviosa al no tener ni idea de qué respuesta ofrecer a su amigo de la infancia. A sus 20 a?os dejó escapar sus sue?os de la infancia tras considerarlos tontos e irreales al comprender que nunca se harían realidad debido al giro que tomaba su vida.

—Lo fue —dijo—. So?aba con tener una velada romántica a tu lado, pero las personas cambiamos. Me hice la idea de qué nunca saldrías conmigo, y fue tonto enamorarme durante la infancia.

A Chris le sorprendió el comportamiento agresivo de Piers. Una parte de Redfield se arrepentía de haber creado falsas ilusiones en la ni?ez, no pudo evitar hacerlo al no soportar ver el rostro de un ni?o pidiendo a gritos una salida a su lado tras sentir una fuerte admiración y amor.

Tímidamente decidió mirar a Piers quien lucía decepcionado porque nunca cumplió su sue?o en aquella época. En ese lapso se enfocó en atacar las recomendaciones de Meghan y Daryl para evitar lastimar al peque?o en el proceso de autoconocimiento, por lo que, Chris aceptaba invitar a Piers a diferentes atracciones temáticas, cines y restaurantes que tuvieran una disponibilidad de juegos para mejorar su recreación infantil.

—Piers, eras un ni?o cuando nos conocimos —dijo Chris—, no pude convertirme en un interés romántico porque va en contra de mi moral. Ahora que has conseguido la mayoría de edad puede darse una relación de cualquier tipo entre los dos.

Piers tomó asiento. Se cruzó de brazos al escuchar las palabras de Chris, durante su adolescencia so?aba en mantener una relación sentimental a pesar de su partida a la universidad en Chicago donde laboraba por cuatro a?os.

La vida para Piers no resultó de acuerdo a sus planes sino tuvo que modificarlos a su presente actual, no estaría pasando por un bache emocional después de su gran pérdida. Aún no lograba sacarse a Matt del corazón, le resultaba complicado porque olvidó a un hombre que formó parte de su vida en una época oscura dentro de la estación de policía, además de los distintos momentos románticos que pasaron.

—Pero, pudiste buscarme —reclamó Piers

El joven con los a?os se había convertido en malcriado y deseoso de cumplir todos sus caprichos. Sus relación se basaban en llenar un vació sentido en su interior y nadie lograba llenarlo, siempre se cuestionaba durante las noches el por qué de aquel sentimiento.

Cada hombre que ingresaba en su vida cumplía un propósito que ayudaba a mejorar su calidad de vida, pero el único que decidió escucharlo y conocerlo sinceramente había sido Matt, un hombre forrado de dinero debido a los negocios de vinícola que poseía en tierras mexicanas.

Un mesero apareció interrumpiendo el momento de tensión formado debido a la discusión constante que estaban enfrentando por las heridas del pasado; les dejó dos cartas del menú y sirvió el vino de cortesía de la casa para darles su espacio temporalmente.

—Iba a casarme cuando te marchaste —dijo Chris, mientras bebía un trago de vino tinto—. Pero, todo se fue al carajo.

Entre los planes de Chris durante su relación Ada estaban contraer nupcias y formar una familia, pero el destino les impidió cumplir aquel sue?o. A él le dolía dejarla marcharse esa noche lluviosa donde discutieron por las decisiones a futuro, Ada deseaba formar parte del FBI siendo agente encubierto, mientras Chris aspiraba a convertirse en jefe de la estación en un futuro; sus sue?os impedían que estuvieran juntos, por lo tanto, la mejor decisión fue una ruptura dolorosa.

Por el contrario, Piers estaba perplejo no esperaba recibir aquella noticia de Chris. Siempre creyó que la se?orita Valentine sería un obstáculo en su relación romántica, provocando estar dispuesto a causar un drama para obtener el amor de Redfield. Nunca pensó que Ada Wong se volvería la mujer cautivadora robando el corazón de su amor platónico.

—Entonces me hubieras buscado —se quejó Piers—. Te estuve esperando durante toda la adolescencia y parte de la universidad, ?Creés que fue fácil arrancarte de mi corazón?

?Por qué le reclamaba a Chris una estupidez?, ?será la nostalgia que provocaba el lugar al recordarle a Matt? Piers contuvo las lágrimas en su interior no puede permitirse sollozar en una cita que decidió tener para quitarse las ataduras dejadas después de la muerte de Matt, se sentía responsable por el accidente del helicóptero porque en la ma?ana habían tenido una discusión cuando no cumplía los caprichos de su pareja.

Solo se sentía culpable por utilizar a Matt para borrar una vieja herida del pasado y el efecto conseguido había destruido a Piers en estos meses.

—No fue sencillo, Piers —replicó Chris, con voz tranquila—. Caí en una profunda depresión cuando perdí a Ada. Apenas puedo levantarme en las ma?anas para continuar adelante. Al menos siente un poco de empatía.

Sin dudarlo el joven se levantó en silencio dejando a solas a Chris. Decidido se dirigió al ba?o de aquel restaurante, la sangre le hervía por el coraje sentido. Una parte de él deseaba evitar la discusión tenida con Chris, no puede desquitar su ira con las personas de su alrededor nadie era culpable del fallecimiento de Matt, la policía había concluído que fue un accidente, siempre existió una duda al respecto que Piers intentó averiguar antes de ser despedido; y otra parte de Piers deseaba quedarse en su habitación a lamentarse por la pérdida e intentando olvidar lo ocurrido, el dolor lo seguía dominando.

Golpeó la puerta de aquel ba?o bruscamente causando que sus nudillos sangraran y las lágrimas recorrían su rostro provocando que se tornara a un color rojizo. El dolor emocional guardado lo invadió en el momentos menos apropiado, nadie sabía lo ocurrido con Matt ni la pérdida de su empleo, le dolía hablar con su familia y conocido que había fracasado en la vida dejando morir sus sue?os.

El inició fue haber intentado superar a Chris Redfield, su primer amor platónico con quien creía que tendría una oportunidad romántico, pero con el pasar de los a?os se percató que jamás sucedería al tener una notable de edad, por lo que, decidió abandonar el sue?o llenando su vacío con relaciones destinadas al fracaso para sanar la herida dejada. Poco a poco todo se fue complicando conforme avanzaba en el camino después de haber terminado su carrera universitaria aprendió a manipular a las personas para conseguir su beneficio sin preocuparse al no conseguir un empleo estable durante su estancia en Chicago y al poco tiempo conoció a Matt, su cura milagrosa para sanar su herida por el rechazo de Chris.

Escuchó unas pisadas dirigirse a los sanitarios. Decidió ocultarse entre los cubículos escondiendo la vergüenza de llorar en público, si su madre lo viera en esas condiciones le daría una bofetada porque un hombre no debe llorar en público al arruinar su masculinidad. A Pies le desagrada las opiniones retrógradas de su familia, en la actualidad hay una igualdad de género permitiendo demostrar nuestras emociones sin prejuicios.

—?Piers? —preguntó Chris con voz preocupada—, ?te encuentras bien? Sí, necesitas contar algo puedes hacerlo. No hablaré con nadie del asunto.

Piers recordó cuando rompió la medalla de su padre que le fue otorgada por haber participado en la guerra con Irak, en una noche que Chris tuvo que cuidarlos debido a la agenda apretada de su hermana por los estudios, lo encontró sollozando en su habitación por el incidente. Ambos platicaron acerca del incidente y encontraron una manera de hablarlo con los demás, desde ahí pudo confiar a ciegas en Redfield.

—Te veo mal, puedo sentir que algo ocurre y necesitas ayuda —insistió Chris

Abrió la puerta del sanitario y limpió las lágrimas derramadas pensando que ha sido débil pensando en los problemas personales que ha estado padeciendo desde hace meses atrás. El miedo le impedía hablar con sus padres porque sería criticado y juzgado por el fracaso obtenido en Chicago.

Camino hacia Chris y no dudó en abrazarlo. Al contrario, Redfield estaba sorprendido, las personas con quien trataba terminaban soltando todos sus problemas sin pedir una muestra de afecto. Redfield sabía cómo solucionar la problemática con Piers y conocer su verdadera historia que Meghan deseaba conocer, pero sería confidencial no le contaría a nadie la charla tenida al ser una situación personal. A veces los padres se preocupaban demasiado por sus hijos impidiendo que consigan un vínculo de confianza con amigos.

—He fallado en la vida —soltó Piers

Los problemas personales ahogaban a Piers dejando que se encontrará en un abismo buscando una salida rápida tomando pésimas decisiones que afectarán su vida personal.

—?A qué te refieres? —preguntó Chris—. Puedes contarme, mientras disfrutamos una comida para alegrar ese corazón.

Chris deseaba sacar el ba?o a Piers para evitar malos entendidos con los comensales del establecimiento. Ayudó al muchacho a limpiar la mucosidad dejada a consecuencia del llanto, y lo tomó de la mano para llevarlo a la mesa, le daba igual los comentarios hechos a sus espaldas a pesar de ser una figura importante en la peque?a ciudad, los periódicos no dudaría en tener un encabezado "el Capitán Redfield se encuentra en una relación homosexual", siendo una noticia anticuada porque a nadie le interesa conocer la orientación de otros.

Recorrieron el pasillo para regresar a su mesa donde los esperaba un mesero, así tomaría su pedido, mientras tendrán una conversación sincera dejando a un lado las inseguridades sentidas. Cuando tomaron su respectivo asiento ordenaron el platillo del día y una botella de vino tinto para mitigar las heridas emocionales; rápido el mesero se retiró del lugar permitiendo que entablará un vínculo.

—Te ofrezco una disculpa —replicó Piers—. No debí comportarme cómo un ni?o malcriado que no tiene ni puta idea de lo que sucede.

Chris le dedicó una sonrisa.

Recordó parte de la infancia del peque?o Nivans solía comportarse cómo un ni?o malcriado dado que, sus padres le brindaban todo lo necesario desde juguetes hasta salidas de recreación sin importar el costo, siendo un hábito difícil de abandonar al venir de una familia adinerada —gracias a Meghan Lightwood, quien es heredera de una florería en Raccoon—, pero comprendía que había sido parte de su educación.

—No te preocupes, un agente me lanzó una carpeta en el rostro cuando no logro conciliar el sue?o por una fiesta vecinal —dijo Chris

—Debió ser horrible —replicó Piers—. Nunca acostumbro a hacer berrinches, pero tengo un sentimiento de culpa.

El capitán soltó una risa al escucharlo. Comprendía el por qué se comportaba malcriadamente al tener todo olvidado parte de su empatía convirtiéndolo en un ni?o mimado.

Por otro lado, Piers estaba asombrado porque hablaría de sus problemas personales con un hombre que no había visto en a?os y es que resultaba extra?o conversar con un desconocido a ciegas, sin embargo le brindan la confianza suficiente al sentir una tranquilidad a su lado recordando viejos de su infancia.

—?Quieres platicar? Soy una caja fuerte no hablaré con nadie —dijo Chris

Bebió un trago de vino tinto. Aún sentía timidez al hablar sobre su problema porque nadie sabía su situación actual, todos conocían una mentira patética creada en una desesperación sentida en una noche cuando Jamie no dejaba cuestionar el nuevo modo de vida llevado después del accidente.

—Perdí a un amigo —mintió Piers, no podría decirle la verdad sobre la relación que mantuvo con Matt en el pasado y el accidente, ya que una culpa lo dominaba después de haber tenido una discusión—. La última vez que lo miré tuvimos una discusión tonta, me arrepiento de haberle hecho un drama, si tan solo… pudiera regresar a ese día hubiera hecho las cosas diferente, estaría tranquilo conmigo mismo.

Chris le dedicó una mirada de compasión a Piers. Es un sentimiento que no puede eliminarse fácilmente, después de conocer las circunstancias en que se dio el problema entre el par de ?amigos?, y había sido una lección importante para Piers en dejar a un aprendizaje.

—No debes culparte por la discusión —dijo Chris—. Todos peleamos con nuestros seres amados, y nos arrepentimos de las palabras que decimos. Seguramente, tu amigo está consciente del error que cometiste y te ha perdonado.

Piers dudaba en las palabras mencionadas. Nadie conocía lo que existía después de la muerte y se dejaban llevar por las referencias mencionadas en diferentes culturas, películas, series o inclusive textos literarios que brindaban una idea sobre lo que hay en el otro lado, aunque decidió guardarse su opinión evitando tener una discusión con Chris.

Volvió a beber un trago. Aún no hallaba las palabras adecuadas para asegurar que posiblemente no serían los pensamientos de Matt en cualquier parte dónde sino todo lo contrario. Agradece a Chris en darle un sermón de segundos intentando apoyarlo emocionalmente con la pérdida.

—Gracias, Chris —dijo el joven, y sonrió—. Siempre transmites tranquilidad y paz, ?Cómo lo haces? Desde peque?o me he sentido así a tu lado.

Redfield tenía una habilidad interpersonal que solía aprovechar en cualquier ámbito de su vida para conseguir una mejoría en las personas que estimaba demasiado, además escuchar y comprender a un individuo es una tarea complicada al existir una intolerancia a su forma de opinar.

—No lo sé, pienso que es un don —respondió Chris—. He tenido esa facilidad de tratar a las personas cuando necesitan apoyo.

A Chris le agrada ayudar al prójimo de diferentes maneras dependiendo de las necesidades de cada uno. Le habían sugerido dedicarse a una carrera en servicios sociales o psicológica, pero siempre prefirió enfocarse a las armas porque pensaba que ayudaría a su país apoyando en los diferentes combates en el campo de batalla; por cuestiones del destino no continúo su legado sino gracias a Barry, un viejo conocido lo apoyó en hallar un empleo en la estación de policía donde logró destacarse y convertirse en uno de los mejores.

Por otra parte, Piers intentaba sentirse tranquilo con todos los problemas personas padecidos durante estos meses. Siempre caía en un episodio de ansiedad provocando que durante las noches saliera corriendo del apartamento con un rumbo desconocido o simplemente no conciliaba el sue?o porque su mente no dejaba de pensar lo ocurrido la última vez que lo vió.

—Debe ser un don estupendo, ?no? —dijo Piers

—Al parecer sí —comentó Chris—, ?Cómo te encuentras?

—Aún siento que sigo en deuda con él.

Chris colocó su mano sobre la mano de Piers y le dedicó una sonrisa.

—?Has pensando en visitar su lápida? —preguntó Chris, curiosamente

—No, ?por qué lo dices? —cuestionó el joven

—Una forma en que puedes liberarte de la culpa es visitarlo a su lugar de descanso y ofrecer unas disculpas.

Piers no lo había considerado durante estos meses solo estuvo ahogado bajo el alcohol cada dos semanas aliviando su culpa y bloqueado con sus pensamientos negativos debido a la ansiedad desarrollada.

—Es una estupenda idea —dijo Piers, y recordó que su situación económica iba a la ruina tras pagar la mecánica de su coche.

—Puedo acompa?arte —replicó Chris—. Claro, si necesitas apoyo emocional porque no es fácil.

El joven se ruborizó cuando escuchó la petición de Chris. No estaba en lo absoluto mal acceder a una compa?ía emocional en el proceso de disculpas dado que, Chris había sido el primer en conocer su historia a base de mentiras evitando mencionar que Matt era su novio, ?por qué le daba pena hablar de Matt? su pareja estaría decepcionada al no presentarlo sinceramente, pero tenía sus motivos personales que se los reservaba.

—Sí, me gustaría ser acompa?ado —dijo Piers

Piers no quería partir el camino solo hasta el cementerio de Chicago donde yacía la tumba de Matt. Debe ser un momento a solas para él, pero no soportaba la idea de conducir por horas pensando en que todo podría cambiar en su vida aceptando su relación con el hombre.

—Vale, en una oportunidad fijamos un día —dijo Chris—. Debes tener una agenda apretada en Chicago, sino me equivoco.

Para Piers eran vacaciones indefinidas hasta que hallará un nuevo empleo en Chicago o en Raccoon para iniciar de nuevo su vida laboral, así evitará que su madre conociera la verdad detrás de las mentiras dichas durante su estancia, además ya comenzaron las preguntas relacionadas a Matt y trataba de evadirlas, aún no puede mencionarle a nadie sus verdaderas.

—Por supuesto —dijo Piers—, revisaré mi fecha de expiración de vacaciones y te mando un mensaje.

Una técnica efectiva para desviar la atención de Chris. Y no sentir una presión ejercida ya que, una culpa lo invadía al involucrarse en un conflicto laboral.

El mesero regresó con sus respectivas órdenes, las cuales disfrutaron acompa?ada de una conversación con temas de interés, ambos volvieron a conocerse debido a que, su personalidad había cambiado con el tiempo. Era interesante que cada uno conversara rasgos de cuando se conocieron por primera vez, Chris continuaba amando las bandas rockeras, mientras Piers continuaba interesado en la literatura criminal.

La cena en el restaurante cumplió de acuerdo a lo planeado. Una conversación ligera donde se conocieran mutuamente olvidando la petición de la se?ora Nivans, a veces los padres pueden entrometerse en los asuntos de los hijos con la intención de conocer lo que ocultan. Chris no puede ser un metiche en la vida privada de Piers dado que, era su privacidad y en algún momento van hablar del problema tenido cuando hallen una solución.

—?Así que eres capitán de los STARS? —preguntó Piers, le sorprendía bastante que Chris haya cumplido su sue?o de

Chris terminó de comerse una rebanada de pastel y miró a Piers, quien lucía sonriente al escuchar cada tema de plática a lado de su amigo.

—Sí, gracias a un caso —respondió Chris—. Rescaté a una peque?a que estuvo perdida dentro del bosque durante una semana. Fue impactante que sobreviviera sin tener a nadie a su lado.

—Por un tiempo, seguí tu trayectoria —mencionó Piers—. Es asombroso la manera en que te esfuerzas, debes tener un control para no estresarte.

—No es fácil, debo sacrificar mi tiempo y es agotante.

—Deberías contratar un asistente.

A Chris todos le hacían el mismo cuestionamiento, contrar a una asistente que lo apoyara en algunas actividad, por lo que, Wesker se tomó la tarea de abrir una vacante bajo el nombre auxiliar de policía, es decir sería una persona encargada de llevar peleo, realizar llamadas telefónicas para seguimiento de los ciudadanos que han hecho un reporte, acompa?ar en reportes hechos y traspasar los reportes hechos a mano. Tareas sencillas, pero tediosas, aún no hallan una persona adecuada para cubrir la vacante puesto que, todas las postulaciones han sido jóvenes en etapa estudiantil requiriendo una disponibilidad de horario por las noches de desvelo que realiza el capitán Redfield.

Por un momento, Piers pensó en ofrecer cómo candidato creando una excusa a su madre asegurando que su trabajo anterior no fue bastante bueno porque extra?aba la vida en la ciudad donde nació, aunque en cualquier momento tendría que decirle la verdad sobre el estupido error cometido.

—Estoy en proceso de contratación —dijo Chris—, no he encontrado la persona ideal para cubrir el puesto, pero sé que aparecerá.

Piers mordió su labio inferior pensando en hacer un comentario adicional para pedir una entrevista; no puede estar en casa de sus padres siendo mantenido indefinidamente hasta que encuentre un empleo estable. Extra?aba recibir su salario semanal para satisfacer sus necesidades de consumidor y gastarlo a lo tonto en compras inecesarias cómo su colección de Star Wars.

—?Crees que pueda enviar solicitud? —preguntó Piers sin dudarlo

Chris alzó una ceja.

—Puede que sí, cumples con los requisitos —respondió Chris—. Pero, ?por qué regresar? En Chicago tienes todo, una vida estable.

—Extra?o a mis padres y mamá ocupa ayuda con papá por el padecimiento que tiene —aseguró

—Sí es así, ma?ana puedes presentarte el lunes a las 10 de la ma?ana para una entrevista con recursos humanos, pero tienes pase directo. Avisa que vas de mi parte, te tomarán en cuenta.

—Gracias, Chris no va ser una equivocación.

Chris pagó la cena del restaurante. Salieron del establecimiento caminando separadamente, mientras charlaban sobre la situación actual de Claire, a Piers le sorprendía saber que la pelirroja había contraído matrimonio con León Kennedy, aquel policía novato que ingresó al cuerpo policiaco a temprana edad para disminuir los casos de desaparición por un asesino a suelto.

Se detuvieron cercas del coche para abordarlo y partir cada uno a su domicilio. Piers sentía una culpa interna al esconderle a su madre la verdad de su motivo en la ciudad, ya no pudo pagar el alquiler ni las deudas, por lo que, se vio en la necesidad de abandonar todo lo construido. Le dolía recordar el trágico suceso y todo por una mala decisión tomada.

—Solo haré una parada en el camino, necesito comprar una cajetilla de cigarros —dijo Chris

Piers asintió.

Ambos subieron al coche. No había ningún silencio entre los dos al continuar charlando de diferentes temas, ahora sacan teorías referentes a la serie de Amores Diferentes debido a que, en la segunda temporada estaba intensa por los cambios que ha dado en su trama.

Piers miraba por la ventana de aquel coche las estrellas recordando la última noche que convivió en una cita con Matt, fue una velada romántica donde intercambiaron más que palabras, extra?aba tener ese contacto en su piel, pero eso había terminado para siempre, ahora solo le quedaba vivir con el recuerdo de aquel amor perdido.

El recorrido parecía ser eterno a su casa. Chris hizo su parada a una tienda de licores donde compro un paquete de cigarrillos acompa?ados con una botella de vodka, la cual planeaba beberla el sábado por la noche mirando un maratón de su serie favorito, y a Piers le llamó la atención la soltería de su viejo amigo y amor platónico, era increíble que estuviera soltero a los 40 a?os, normalmente todos consiguen una vida estable, pero hay excepciones.

La música de Queen lo acompa?ó en los siguientes minutos. Estar a lado de Chris le recordaba bastante a Matt, ambos tenían la misma edad y una diferencia que se notaba en lo absoluto para eliminar sus pensamientos deprimentes, enfocó su mirada hacia Chris, quien lucía una sonrisa, mientras conducía aquel coche.

—Chris, ?por qué no rehiciste tu vida? —preguntó Piers

Chris soltó un suspiró.

—No fue sencillo, la mayoría de las mujeres que buscaban una cita conmigo están casadas y no pensaba ser su amante —respondió—. Prefiero la soledad antes de destruir un hogar, no es justo para los ni?os ver a sus padres divorciados y pelear por una tercera persona.

Una respuesta sincera mencionada por Redfield. A Piers le agradaba escuchar esa sinceridad, por lo que, recordó la promesa hecha en su infancia donde sería la pareja de Chris, no estaría mal intentarlo de nuevo, ambos se ayudarán mutuamente a no sentir aquel sentimiento de soledad.

—Cierto —dijo Piers—. Yo hubiera tomado la misma decisión, pero puedes salir con una mujer joven.

Chris rió.

—Estoy abierto a cualquier experiencia —dijo, sin dudarlo

Eso le daba un plus a Piers debido a la orientación que poseé. Aunque, se sentía mal al usar a un amigo de esa manera, no puede arrastrarlo a una relación tormentosa hasta haber superado todo lo sucedido, pero se permitiría la oportunidad de volver a sentir la magia del amor.

—Interesante —dijo Piers

El coche se detuvo frente a la casa de sus padres. Se puede observar una tranquilidad y las luces estaban apagadas, todo aparentaba estar calmado con su padre, quien tiene un padecimiento grave debido a sus lesiones en el campo de batalla.

—Deberíamos tener otra salida si te parece.

—Me encantaría, Piers —dijo

Piers tomó la iniciativa para asegurarse de que Chris cumpliera la promesa hecha sin la necesidad de obligarlo a cumplir sino sería una manera voluntaria de conocer y crear un vínculo emocional.

—Creo que deberias bajarte porque Daryl hará una locura —aseguró Chris

—Gracias por todo, nos enviamos un texto —se despide Piers

Piers miró hacia la entrada del domicilio y vio a su padre sostener una escopeta para salir a punto de defender a su país. Su momento había sido arruinado, pero tendría una oportunidad con el Capitán Redfield, después de todo su sue?o puede cumplir después de las pláticas motivadoras escuchadas en el restaurante.