Los personajes que aparecen aquí pertenecen al grupo de mangakas CLAMP, la historia la estoy escribiendo yo.

Capítulo VII

Era sábado y a pesar de que tenía bastantes pendientes, Syaoran había decidido trabajar solo media jornada ese día. Fue así que había llegado a su cafetería predilecta Coffe-Tea Mermaid por su ración diaria de café, y era que esa maana estaba de tan buen humor que había decidido llevarse un par de muffins; uno de frutos rojos para degustar en el camino y otro de chocolate para disfrutarlo en el transcurso de la maana en su oficina. Cuando ya iba de salida del establecimiento se detuvo para sacar el primer panecillo de su envoltura para poder comenzar a disfrutar, y en ese momento a la distancia le dio la razón a Sakura acerca de que eran de un sabor sublime, mientras comenzaba a degustarlo emprendiendo nuevamente su camino.

Dio una rápida vista a su reloj de pulsera y vio con asombro que ya iba tarde a su oficina unos veinte minutos. Al tomar la manija de la puerta de salida del establecimiento para emprender su camino, alguien lo aventó abruptamente ocasionando que por poco tirara sus preciados muffins y el termo repleto de café que llevaba consigo.

—Oye, Fíjate por donde vas! — comenzó a despotricar verificando que no hubiera tirado nada al piso —Qué no te das cuenta que este es el lado de la salid…? —Comenzó a decir hasta que, a la mitad del reclamo, decidió voltear a ver a la persona que casi le provocaba un infortunio.

—Syaoran! — escuchó claramente como la saludó con efusividad y emoción cierta castaa que era la responsable de su actual desvelo

—Sakura? Creí que a esta hora ya estarías en tu trabajo

No lo podían creer ambos, pues Cuáles eran las probabilidades de que se encontraran ellos dos en ese lugar a esa hora? Hasta donde sabía el castao, ella entraba más temprano que él y de por sí, ese día ya iba tarde. Simplemente la situación le parecía alucinante.

—Así es, pero como llegué un poco tarde, en lugar de que me descontaran el día, me sancionaron enviándome por las bebidas de mis compaeros de área— aceptó divertida por la situación—Veo que tú también vas tarde

Justo cuando comenzaron a sumergirse en una amena charla en la cual ella le explicaba que uno de sus compaeros cumplía aos ese día y para justificar su retraso, la enviaron por pastelitos y cafés para festejarlo, hasta que ambos escucharon un carraspeo proveniente a un costado de Sakura que los sacó de su enajenamiento.

—Oh disculpen, los presento. Naoko, él es Syaoran Li… un buen amigo, Syaoran, ella es Naoko Yanagisawa una amiga de hace muchos aos y actualmente somos compaeras de trabajo.

Tras un intercambio de presentaciones y una breve platica entre los tres sucedió algo inesperado, o al menos algo que terminó de descolocar por completo al joven.

—Tienes planes para esta noche Li? — le preguntó de un momento a otro la joven que responde al nombre de Naoko

—Hasta el momento no— fue todo lo que dijo él

—Te gustaría acompaarnos a celebrar el cumpleaos de Doumeki? No creo que haya problema alguno en que acompaes a Sakura esta noche

Syaoran instintivamente volteo a ver a la antes nombrada castaa para encontrar algún indicio de aprobación en su rostro y al entrever la sonrisa radiante que se vislumbraba en su rostro, aceptó sin meditarlo un segundo más.

—Sí, claro

—Que bien— celebró con autentico regocijo la castaa— en el transcurso del día nos ponemos de acuerdo

—Un placer conocerte Li, nos vemos después — se despidió de él en ese momento la compaera de Sakura — Sakura, me adelantaré a realizar el pedido

—Ya te alcanzo— contestó la castaa para después dirigirse hacía el chino— De verdad me acompaarías esta noche?

—Claro, será un placer…— dijo al momento en que comenzó a sonar su teléfono— disculpa debo contestar esta llamada—

—No te preocupes también debo de ir a pagar y ayudar a Naoko, te escribo más tarde, va?

—Estaré esperando tu mensaje, nos vemos

—Bye

Y sin más cada uno siguió su camino respectivamente en la espera de que se enviaran dichos mensajes para ponerse de acuerdo en la salida que tendrían esa noche.

.-

Esa madrugada no había podido dormir más de dos horas seguidas, y a pesar de que la noche anterior había sido pesada en cuestión a las emociones que había vivido tanto con Sakura, como con el exnovio de ella antes de que se la topara en el supermercado, se sentía fresco como una lechuga.

Así que sí, se encontraba desvelado, pero contrario a lo que cualquiera pudiera pensar, no se encontraba completamente cansado ni de mal humor. Por una extraa razón, de la que no quería pensar ni en absoluto aceptar, contra todo pronóstico, se había levantado de muy buen humor. Algo de lo que se dieron cuenta todos los que lo conocían a su alrededor, o que lo habían tratado en algún momento; comenzando con el chico que usualmente le atendía en el Coffe-Tea Mermaid, para continuar con sus colegas con los que se encontró más tarde cuando llegó a la agencia, quienes con autentico regocijo descubrieron que el jefe no era del todo un robot.

— Li, acaba de marcar Motosuwa para reagendar la cita que tenía hoy contigo en la tarde, la pasó para la siguiente semana— lo recibió un joven en cuanto entró a su oficina y se acomodaba frente al computador.

— Excelente podrías reagendar las otras citas que tengo en la tarde para después? — le pidió a Domoto, un joven muy dedicado que fungía como su asistente

Después de eso, dedicó toda la maana en sacar lo más pronto posible los pendientes que tenía para ese día. Y aunque no convivió demasiado con los demás integrantes de su equipo de trabajo, ellos se dieron cuenta de que él estaba de un extrao buen humor, y le supieron sacar provecho haciendo que todos para las cuatro de la tarde ya hubieran salido hacia sus respectivos hogares.

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Si me acompaaras esta noche?
Leído 10:41 am

Solo si aun sigue en pie la invitación
Leído 10:42 am

Por supuesto, iremos a un bar en el
barrio de Shimbashi
Leído 10:45 am

Quieres que pase por ti o nos vemos allá?
Leído 11:10 am

Te puedo confirmar en el transcurso de la
tarde?
Leído 11:11 am

Claro, espero tu respuesta
Leído 11:11 am

Había pasado toda la maana y aun no le había enviado la respuesta a Li, la verdad no se le había olvidado, solo fue que no sabía qué contestarle. Hasta que en la tarde después de haber salido del trabajo, había quedado de verse con Tomoyo para ayudarla en arreglar y acomodar unos trajes que su madre necesitaría para sus trabajadores en el lanzamiento de unos productos que tendría esa noche su empresa.

—Qué pasó? — preguntó Sakura cuando no pudo soportar más el hecho de que su prima la estuviera observando detenidamente y en completo silencio mientras realizaban sus actividades.

—Ya me dirás por qué me enviaste esas fotos a altas horas de la noche? o tengo que esperar más tiempo? ― preguntó Tomoyo mientras daba los últimos toques a los atuendos y dirigía una mirada de reojo hacia su prima

—Nada fuera del otro mundo― comentó la castaa creyendo que con eso sería suficiente para que su prima no la moliera a preguntas― por precaución? — dijo después de ver que su prima no se conformaría con lo anterior

—Es pregunta? — le cuestionó divertida la morocha al haber escuchado su respuesta— Qué fue lo que pasó?

Así, la castaa le contó como después de haber llegado a su casa la noche anterior sintió antojo y a pesar de la hora, había ido a comprar algunas cosas al supermercado, coincidiendo en ese lugar con Li. De cómo se pusieron un poco al día y él amablemente se había ofrecido a llevarla por la ligera llovizna que comenzó a caer y que después se convertiría en lluvia y fue así como le había enviado las fotos a ella por precaución y costumbre.

—Tengo una duda—comentó de repente Sakura— Por qué me habías dicho que quieres que remodele mi apartamento? Si él me dijo que le gustaba, que la decoración me pega

—Invitaste a Li a tu departamento? — preguntó exaltada la morocha dejando de acomodar los vestuarios en sus respectivos porta trajes para verla de frente y directamente a los ojos

—Me dio pena que aún no hubiese comido nada en todo el día, y que para rematar yo lo estuviese atrasando más

— Entiendo, con que ahí no termina la historia Y qué más sucedió?

Después de eso le contó la parte en que habían estado en su departamento; de cómo lo invitó a cenar, le mostró su base confidencial, e incluso que le había prestado ropa de Touya porque debido a su torpe descuido el pobre se había empapado de más, llegando a la parte en la que le preparó una cena sencilla, lo acompaó cenando un poco con una amena e interesante platica y cómo fue que se hizo de su usuario de LINE antes de que se fuera y tuvieron una corta videollamada cuando él llegó a su lugar, ya que ella así lo había solicitado.

Y así esperó a que su prima y mejor amiga le dijera la opinión que tenía acerca de lo que había sucedido.

—Entonces invitaste a Li a cenar a tu departamento en agradecimiento por haberte llevado hasta tu departamento evitando que te mojaras por la lluvia, pero provocando que él se empapara— recapituló con una sonrisa en sus labios y una mirada llena de aoranza

—Sí, aunque ya había decidido tomar un taxi— aceptó— Y sí, incluso se olvidó su camisa y suéter en la secadora

—Y además lo invitaste a conocer tu base confidencial— citó rebosando de emoción

—Lo dices como si fuera algo malo

—En absoluto. Todo lo contrario— dijo con extraa satisfacción la amatista— Me parece que ustedes dos podrían hacer buena mancuerna

—No lo sé, la verdad es que es demasiado serio, a tal grado que me crispa un poco los nervios

—Que pena que no lo pasaras bien con él anoche —dijo entristecida Tomoyo de que hubiese sido así, pues por alguna extraa razón ese tal Li le agradaba y eso que ni siquiera lo conocía… aun

—No, no me malentiendas. En un principio solo yo le vomité una verborrea encima para ver si le sacaba una oración de más de diez palabras e increíblemente sí sucedió

—Verborrea como tal o una de tus locuaces discursos?

—Sabes que no sé distinguir una de la otra… —expresó Sakura con agobio—Es una pena que no puedas ir a celebrar esta noche el cumpleaos de Doumeki

—Ya será en una próxima— dijo para después indicar a sus asistentes que subieran todo a la camioneta para trasladarlos al lugar donde sería el evento de su madre

—Hubiera sido una buena ocasión para que lo conocieras

—A quién? ― preguntó Tomoyo no creyendo que su prima hubiese sido capaza de invitar a quien era el tema central de aquella platica

—A Syaoran de quién más estamos hablando? — la morocha no pasó por alto el hecho de que se refería a él por su nombre de pila, pero como en muchas otras ocasiones lo dejó pasar, no quería perder el hilo de esa conversación

—A Li? lo has invitado?

—No precisamente yo, fue Naoko—aceptó y fue así que la castaa le platicó el fortuito encuentro que tuvo con él en la maana en la cafetería y de cómo Naoko lo había invitado al convivio que tendrán de esa noche sus compaeros de trabajo para festejar a uno de ellos.

—Aunque en el transcurso del día llegué a la conclusión de que, si no lo hubiese hecho ella probablemente lo hubiera hecho yo.

Y eso que le crispaba los nervios quiso comentar Tomoyo a su prima, pero sabía que si lo hacía en ese momento, provocaría que la castaa cambiara de tema por puro bochorno y quería saber un poco más acerca de esa inusual relación que estaba teniendo su prima

— Sabes que no me gusta ir sin compaía a las reuniones que hacen los chicos del trabajo— comentó después de pensar un poco la castaa

Y como no iba a saberlo, si la morocha era fiel testigo de cómo el festejado tenía un poco más de ao y medio echándole los tejos a Sakura. Lo cual la despistada de su prima no se había percatado de ello, hasta que hacia un poco más de dos meses en que él le había pedido que tuvieran una cita en plan romántico.

— Te crispa los nervios, pero te alegra que te vaya a acompaar esta noche— meditó como no queriendo su prima, a voz ligeramente baja— Espero que la pases bien. se verán en el lugar? — cuestionó antes de que su prima le refutara lo anterior

— Pues se ofreció pasar por mí, pero no sabía a que hora terminaría de ayudarte

— Definitivamente tienes que irte ya a tu departamento a ponerte linda para esta noche

— Pero aun no terminamos

— Sakura, sabes que tengo a personas a mi disposición para eso. Además, no me perdonaría que no tengas el tiempo suficiente para que te arregles

— Pero no es ninguna cita, para ser sincera había pensado decirle que nos viéramos en el lugar

— Bueno, eso lo decides tú. Ya después me contaras como te fue— sin mas despachó a su prima y mejor amiga para que tuviera el tiempo suficiente para arreglarse

Y mientras la castaa iba en el bus rumbo a su departamento, decidió enviarle el mensaje prometido a Li.

Puedes pasar por mí a mi departamento?
Leído 6:54 pm

Claro A qué hora?
Leído 6:55 pm

A las 9:30 te parece bien?
Leído 6:55

Ahí estaré, hasta entonces
*sticker de guio
Leído 6:56

.-

No lo iba a negar, pero tampoco a aceptar que estaba nervioso como no lo estaba en mucho tiempo. No entendía cómo era posible que el día anterior a esa misma hora ni siquiera se habían visto frente a frente y en ese momento ya tendrían su primera cita… claro, debía de recalcar el hecho de que no estarían solos en lo absoluto, por ende acaso contaba cómo cita? Es decir, debería de pensar en otras cosas pues aún se encontraba asimilando todo lo que había acontecido en las últimas 24 horas.

Así con los nervios a flor de piel, llegó hasta la puerta del departamento de ella a la hora acordada, se echó un rápido vistazo de que todo estuviera en orden y tocó el timbre a la espera de que le abrieran la puerta.

— Qué quieres? — escuchó que le espetaron en cuanto se abrió la puerta, y ante él aparecía un sujeto que le sacaba casi una cabeza de altura, que le ofrecía una cara de molestia y pocos amigos.

Se preguntó por un momento si acaso se habría equivocado de puerta o edificio, aunque estaba completamente seguro de que estaba en el sitio correcto.

— Aquí es el departamento de Sakura…? — trató de ver un poco más allá del recibidor para ver si era el mismo lugar en el que había estado la noche anterior, pero lo único que alcanzaba a vislumbrar era a ese pesado que se cargaba una pinta de matón

— Tú quién eres? — preguntó el energúmeno morocho que impedía que pudiera ver más allá de él. Y ambos se preguntaron internamente; quién podría ser ese individuo y que hacía en ese lugar? Respectivamente

— Creo que me equivoqué de edificio — resolvió a contestar para dar un paso atrás y tratar de buscar el piso correcto esperando que no se le hiciera muy tarde

— Te he preguntado Quién diablos eres tú? — volvió a espetar el morocho haciendo que detuviera su marcha y volteara su vista nuevamente a él.

— Y yo si este es el departamento de Sakura — le contestó perdiendo un poco la paciencia y olvidando otro tanto la educación que lo caracterizaba, para ir adaptando la misma posición de desafío que tenía el sujeto que estaba frente a él, demostrando que no se dejaba intimidar con facilidad.

— Escúchame muy bien mocoso porque solo te lo diré una vez— escuchó que expresó con furia contenida y vio como dio un paso hacia él — más te vale que no te quieras pasar de listo— le dio alcance para después tomarlo del cuello de su chaqueta y acercarlo peligrosamente a él

— HERMANO! Qué crees que estas haciendo? — salió justo en ese momento Sakura detrás de aquel tipo y se interpuso entre ellos dos logrando que lo soltara de su chaqueta y, al parecer no le pudiera hacer nada malo a él.

— Solo le estaba advirtiendo que no se quiera pasar de listo— dijo restándole importancia al momento en que daba un paso atrás, pero siguiendo amenazándolo con su mirada, por lo cual Syaoran no se acobardó y le dedicaba una mirada de desafío contenida.

— Ay hermano, ya puedes marcharte, ya has comprobado que yo no tengo nada aquí — le dijo la castaa mientras se disculpaba con una mirada rápida de vergüenza al chino

— Yo sé muy bien donde dejo mis cosas, y recuerdo que aquí fue el ultimo lugar donde la vi y usé

Syaoran se encontraba ajeno al hecho de que en ese momento Sakura le estaba rezando a todos los dioses habidos y por haber, para que él no llevara consigo las prendas que le había prestado la noche anterior con la intención de regresárselas, y eso al parecer había funcionado porque ella no veía ninguna bolsa o indicio de que llevara alguna.

— Como sea, ya me voy. Cierras al salir — comentó la chica pasando de largo al que decía ser su hermano

— Aquí estaré esperando hasta que regreses

— Qué? Tú no harás eso— le contestó con seguridad y una sonrisa mal fingida

— No te estoy preguntando, aquí voy a estar he dicho— dijo para después entrar y cerrar la puerta del apartamento de ella

— AAAH HERMANO, HAS LO QUE QUIERAS— le gritó mientras tomaba a Syaoran de una de sus muecas y prácticamente lo arrastraba lejos de ahí

— Ah Sakura no grites, pareces un monstruo! — expresó saliendo nuevamente y poniendo cara de fastidio, pero molestándose al ver la forma en que había tomado su hermana a aquel pelele— OYE T, SUELTA A MI HERMANA! — le gritó a Syaoran a pesar de que quien lo sujetaba a él, era ella— Y a ti no se te vaya a ocurrir llegar muy tarde, ya sabes, aquí estaré esperando!

— Ya hermano, espero que cuando regrese ya no te encuentres aquí! — le refutó mientras comenzaban a bajar ambos las escaleras del edificio — Perdona, a mí también me ha tomado por sorpresa su visita, cuando llegué a mi departamento ya estaba dentro

Hasta casi salir del edificio, fue que ella se percató que aún lo tenía tomado de la mueca, para después soltarlo y dándole libertad a él. Después se dirigieron al vehículo de Syaoran y se acomodaron para después ponerse en marcha.

— Así que él es tu hermano

— Ah sí jeje— aceptó Sakura con un ligero rubor cubriendo sus mejillas— Perdón, olvidé por completo el presentarlos, pero es que cuando está en ese plan de hermano sobreprotector, puede llegar a ser un borde de primera— a pesar de las palabras que acababa de decir Sakura, para él no era otra forma de disimular el afecto que le tenía a su hermano— No te dijo nada raro verdad?

— No, la verdad por un momento creí que me había equivocado de edificio — aceptó divertido recordando como ella alguna vez le había dejado entrever que su hermano les espantaba a los pretendientes, ahora entendía a lo que ella se había referido

Mientras se dirigían al lugar del festejo, Sakura le contó cómo fue que se llevó una gran sorpresa al encontrarlo en su piso buscando la sudadera que le había prestado a él la noche anterior, pues al parecer formaba parte de un conjunto deportivo que utilizaría en uno de esos días.

—Sinceramente fue un alivio cuando salí y vi que no traías nada contigo— confesó sincera— No sé cómo habría reaccionado si se llega a enterar que te he prestado su ropa… Aunque yo no le veo nada de malo, pero conozco a mi hermano y él tiene el don de sacar de contexto todo lo que se refiere a mí

— Pues estas de suerte porque están justo atrás, solo que salí tan de prisa que me olvidé de bajarlos — dijo mientras apuntaba a la parte trasera donde se alcanzaba a ver una bolsa— aunque pensándolo bien, creo que quien tuvo suerte fui yo

— No quiero asustarte, pero así fue— le dio la razón ella

El resto del camino para cambiar el tema de conversación, Sakura se dedicó a poner al día a Syaoran respecto de cómo fue que ella comenzó a trabajar en aquel museo gracias a una de sus amigas de la infancia, que justo había sido Naoko, la chica que conoció esa misma maana.

Cuando llegaron hasta el sitio, entregaron el automóvil al valet parking y se adentraron al lugar. Al estar dentro, se percataron que no era del todo un bar y que se encontraba muy concurrido, quizá porque era sábado, o tal vez porque se hallaba de moda, ninguno de los dos tenía idea de aquello, ya que ambo no solían frecuentar ese tipo de lugares

— Mira, allá están los chicos! — gritó Sakura sobre uno de sus hombros para hacerse escuchar mientras apuntaba al sitio donde estaban— Vamos!— le dijo para después tirar de él nuevamente de la mueca

—Sakura que bueno que has llegado, creían que no vendrías hoy— Alcanzó a escuchar que le dijo una chica

Después de eso, Sakura lo presentó con el grupo que estaba ahí, y no pasó desapercibido ni fue ningún secreto que el festejado se vio completamente ofendido porque él estuviese acompaándola. Y en una jugada que ninguno de ellos dos se percató, fueron separados por el festejado acaparándola a ella, y un pequeo grupo que lo entretuvieron a él.

— Así que eres de china? He escuchado que al parecer Sakura tiene inclinación por los chinos— le preguntó un sujeto con algo parecido a la saa

—Disculpa, no sé a lo que se refieren con eso — por más que se quería hacer el desentendido, sabía perfectamente a lo que se había referido con ese comentario

— Anda hombre, no me hagas caso. Son solo cosas que se han escuchado por ahí…

La primera hora para Syaoran fue un suplicio, al grado de que llegó al punto de arrepentirse con toda su alma por haber acudido a ese lugar. Es decir, ni siquiera se encontraba a lado de Sakura acompaándola. Y las personas que estaban con él solo le hicieron de su conocimiento el saber cómo desde que Sakura había entrado a trabajar al museo, el tal Doumeki se había dedicado a tratar de conquistarla.

Soportando en ese momento que el susodicho festejado la estuviera acaparando con el vil pretexto de ser eso, ser el festejado.

—Hola Li, que bueno que has venido — se había acercado a saludarlo un momento Yanagisawa, si mal no recordaba que se llamaba

—Gracias por la invitación— saludó con leve asentamiento con la cabeza— y lo siento, pero creo que no puedo estar de acuerdo contigo

—Oh vamos, no te conozco en lo absoluto, pero puedo decirte que con lo poco que los vi en la maana compartir a Sakura y a ti, te puedo asegurar que no tienes nada por lo que temer, y sobre todo soportar — apuntó y él sintió como si lo quisiera serenar— pero si te puedo preguntar Qué haces aquí? Deberías de estar acompaándola a ella, no de este lado con cara de querer estar en cualquier sitio menos aquí con ellos, y eso lo entiendo, lo que no entiendo es por qué has estado tanto tiempo soportando lo que dicen y no donde deberías— puntualizó apuntándolo a él y después a Sakura

Ella que iba a saber, si justo en la maana había sido la segunda vez que se veían frente a frente desde que sabían el uno del otro Sakura y él. Pero agradeció que al menos hubiera alguien que de una u otra manera demostrara simpatía por él en ese momento además de Sakura. Así que, sin más, se sacudió el tedio y se acercó hasta donde se encontraba la razón de que él estuviera en ese lugar.

Y solo así, estando al lado de ella, comprendió por qué la tal Yanagisawa lo hubiese invitado, si para él hasta ese momento había sido incomodo, para Sakura había sido un suplicio, pues estando junto a ella entendió las miradas que ella le había dedicado todo ese tiempo. Las cuales habían significado que pedía su auxilio para que la rescatara de la compaía de aquel tipo. No cabía duda de que era un patoso. Así se abrió espacio para quedar a un lado de ella.

—Vamos por un poco de agua— invitó Sakura tirando de él justo después de que lograra acomodarse a su costado.

—Creo que debes de estar arrepentido de haberme acompaado— se disculpó en cuanto llegaron hasta la barra y estuvieron lejos del escrutinio de los demás

—No— mintió— me agrada estar contigo, aunque eso implique soportar un poco a los molestos de tus amigos

— Solo Naoko es mi amiga y no creo que ella te hiciera sentir incomodo, de ahí en más son solo compaeros— dijo y después le solicitó una botella de agua al barman

— Creo entender porque me invitaron— dijo incómodo para después pedir él un botellín de agua mineralizada

— No pienses que te he utilizado por favor— le pidió Sakura esperando que de verdad no lo hubiera pensado mientras le entregaban la botella de agua que había pedido antes y dando un sorbo

— No lo había considerado hasta ahora— comentó entre ofendido y divertido provocando algo parecido a la angustia en Sakura — lo que no comprendo es el por qué, si no querías estar aquí, has venido

— Por compromiso— dijo ella bajando la vista — y porque me pareció buen pretexto para invitarte a salir— confesó tratando todavía ocultar el sonrojo que había en su rostro

Por un instante Syaoran creyó haber escuchado mal, pero por la reacción de bochorno que estaba teniendo ella confirmó que sí había escuchado bien

— Entonces si no te sientes cómoda estando aquí, podemos irnos

— No, no te preocupes. Solo no te alejes mucho de mí — pidió sincera

Después de eso y de haber terminado sus bebidas, ella los guio de regreso hasta donde estaban los compaeros de ella, jalando nuevamente de una de las muecas de Syaoran, al parecer se le estaba haciendo costumbre a ella hacer aquello.

No estuvieron con el grupo ni dos minutos pues ella nuevamente había tirado de él con el pretexto de que irían a bailar.

— Pero yo no sé— fue lo que dijo mientras observaba a los que estaban a su alrededor y casi se desmallaba al comprobar cómo se suponía que se bailaba la música que estaba en ese momento.

En otro momento hubiera parado en seco a Sakura, pero al querer huir también de la extensa mayoría de los compaeros de ella, no objetó en lo absoluto. Siempre dio por sentado que él no tenía buena coordinación a la hora de bailar, hasta ese momento que comprobó que no se le daba para nada mal. Y a pesar de que no se movían como los demás a su alrededor, supieron adaptarse a un sensual ritmo que los dejó disfrutarse sin miramientos.

— Creo que no te lo he dicho antes, pero luces hermosa — le dijo en una de esas veces en que el ritmo que seguían y la música se prestaron para hacer tal observación— Me gusta como baila contigo tu vestido— manifestó al momento en que recorrió con su mano derecha desde un poco arriba de su cintura hasta posarla en su cadera

— A mí me gusta como se te alborota más y más el cabello al moverte tanto— le declaró ella después de pasar una mano por sus cabellos simulando el peinarlo y fracasando en el intento

Regresaron un par de veces a donde estaban los demás a descansar un poco y a hidratarse, pero en cuanto se sentían con la energía renovada regresaban a bailar otro tanto. Así estuvieron hasta que comprobaron que la mayoría del grupo de Sakura se habían marchado ya, y al comprobar la hora se sorprendieron que pasaban de las 2 am decidiendo que era hora también de marcharse ellos.

El camino de regreso lo pasaron en un cómodo silencio, en el cual Syaoran por un momento pensó que ella se había quedado dormida, descubriendo que no había sido así solo hasta cuando al llegar, ella volteo a verlo con una sonrisa en sus labios. Ninguno de los dos dijo nada, sencillamente ambos dieron por hecho que él la acompaaría hasta la entrada de su departamento y así fue.

— De verdad te agradezco que me acompaaras esta noche, me he divertido mucho. No había imaginado que fueras tan buen bailarín— le dijo ella cuando se detuvo a la entrada mientras buscaba su llave en la pequea cartera que llevaba

—Yo tampoco tenía idea— confesó abochornado— También la pasé bien, gracias por invitarme— le agradeció al momento en que daba un paso a ella con expectante antelación al tiempo en que la tomaba de una mejilla

— Monstruo, eres tú? — abrió en ese momento su hermano la puerta de su apartamento asomándose para ver si se trataba de ella

—Hermano, Qué haces aquí? — preguntó con frustración al momento que iniciaba una guerra de miradas con su hermano mayor

—Te dije que te estaría esperando— le contestó con burla y al ver que ella no se encontraba sola sino acompaada por el mismo sujeto que había pasado por ella, su semblante cambió por uno de enfado— Tú que haces aquí mocoso?

—A quién le llamas mocoso? — preguntó Sakura, antes que Syaoran, molestándose más con su hermano por tal descortesía

—No veo a nadie más que a un monstruo acompaado por un mocoso— siguió picando Touya a su hermana con la intención de hacerla quedar mal en presencia de aquel sujeto

Pero a diferencia de lo que había ocurrido cuando Syaoran había llegado por ella, en ese momento se dedicó a observar la relación y trato que tenían ambos hermanos.

— Bueno, yo me retiro. Gracias nuevamente — se despidió de ella a la distancia

— Me avisas cuando hayas llegado

— Claro

— Sí, sí, anda ya puedes irte— rompió Touya el ambiente que se había formado entre su hermana y el mocoso

— Ay hermano, eres un pesado

— Qué? Acaso arruiné sus planes? — preguntó el mayor entre molesto y aliviado de que eso pudiera ser cierto

— Eso no te importa— fue lo ultimo que alcanzó a escuchar que dijo Sakura antes de que ambos hermanos se adentraran al departamento de Sakura

Partió de ahí con rumbo a su piso sin siquiera imaginar que una visita repentinamente parecida a la que había tenido la castaa, lo esperaba a él también.

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Hola que tal, muchas gracias por llegar hasta aquí, que les puedo decir la verdad me divertí mucho escribiendo este capitulo con las apariciones de Touya jajaja, es un hermano muy divertido, con un toque sobreprotector muy de él, pero siendo (un poquito) consiente de que su hermana también ya merece y debe despegar jaajaja

Espero subir el que sigue antes de que termine el ao, igual no prometo nada, pero haré lo que pueda.

Gracias nuevamente por seguir leyendo y espero leernos pronto